Con un compromiso de apoyar la construcción del santuario de la parroquia Divino Niño, ubicado en el sector de Mucho Lote 2, al norte de Guayaquil, la Prefectura del Guayas se llevó todos los aplausos de la feligresía que este domingo 31 de agosto fue parte de la ceremonia de colocación de la primera piedra del citado templo. Antes del acto protagónico hubo una misa oficiada por el cardenal Luis Gerardo Cabrera, en el templo provisional de la parroquia que no cuenta con paredes, pero está situado en el mismo terreno donde se levantará la estructura. En la parte final de la misa, Cabrera instó a la comunidad a que pongan también de su parte, pues el financiamiento de esta obra no solo es cosa de la iglesia ni de las empresas ni instituciones públicas aliadas.
En primera fila del servicio religioso estuvo Marcela Aguiñaga, prefecta del Guayas, acompañada de su esposo. Luego de la bendición, Cabrera, junto al sacerdote Gonzalo Torres, párroco, caminaron en una calle de honor formada por niños y jóvenes que realizan su catequesis, así como de sus instructores. Los clérigos llegaron a una pequeña explanada, donde ya se ven los cimientos de una parte del templo, donde se realizaría el evento formal. “La palabra es como una roca y sobre las rocas se va construyendo la casa, el templo”, refirió el cardenal, quien recalcó que las personas sabias construyen su casa sobre rocas “y si vienen los vientos y tormentas que arrecian sobre ella, esta se quedará firme”.
Acto seguido, Cabrera, Aguiñaga y Torres se colocaron frente a un pequeño hueco sobre el que estaba suspendida una roca. Esta vez no había que cortar una cinta sino que las autoridades tuvieron que desamarrar un pequeño nudo para dejar caer la piedra. Luego, los tres tomaro una pala y colocaron tierra sobre el horamen. La algarabía de los creyentes se evidenció en gritos y aplausos, a pesar del inclemente sol que elevó la temperatura a 38 grados, al menos.
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“Se necesitarán recursos para la consctrucción de la edificación porque recordemoan también que el ámbito de las inversiones que hace la Prefectura del Guayas es generar corredores turísticos religiosos, que es una forma de convocar a visitantes tanto nacionales como internacionales”, señaló Aguiñaga, quien resaltó precisamente el reciente apoyo a la Catedral de Guayaquil y otras obras alusivas. Aguiñaga recordó que anteriormente había una procesión multitudinaria del Divino Niño en Durán y señaló que sería interesante retomarla. De su lado, Cabrera tildó al proyecto comi maravilloso, pues la planificación del santuario prevé una casa parroquial, dispensario médico, el templo propiamente, parqueaderos y muchos otros espacios. “Hay que reconocer la bondad y generosidad de tantas personas. De gota en gota se llena el vaso y de vaso en vaso, puede convertirse en un río o en un mar”, detstacó el sacerdote.
La primera fase de la obra comprenderá el templo principal. Luego en la segunda se construirán salones y aulas para catequesis y centro médico y como último, una capilla, plazoletas y parqueos, así lo detalló Víctor Fernández, coordinador general del Consejo Económico de la parroquia, quien especifió que solo la primera fase tendría una inversión de $1′500.000, mientras que el complejo total, entre 4 y 5 millones de dólares. (I)