Varias familias de la comunidad La Encantada, perteneciente a la parroquia Pueblo Nuevo, en Portoviejo, sacaban enseres y ropas enlodadas luego de la intensa lluvia caída la noche del lunes en casi toda la provincia. Aquello ocurrió la mañana de este martes.

Javier Solís, coordinador general de Emergencias del Municipio de Portoviejo, señaló que unas 80 familias resultaron anegadas por la aparición de quebradas que tenían algunos años que no había en las parroquias Abdón Calderón, Riochico y Pueblo Nuevo.

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Solo en La Encantada, algunas familias evacuaron por su cuenta y otras volvieron a sus casas tras el descenso del nivel de las aguas.

Maritza Murillo, habitante de La Encantada, sacó la mañana del martes los enseres que perdió por la fuerte precipitación. Las pérdidas de ella y su familia son cuantiosas, dijo.

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A lo largo de la vía Portoviejo-Junín hubo deslizamientos de tierra que fueron retirados por personal municipal y otras empresas.

A la altura del cerro de Junín hay restricción al paso por la caída de tierra.

Esta tarde maquinaria pesada se encargaba palizada y restos de desechos que estaban retenidos en el viaducto que conecta a Portoviejo con los cantones Santa Ana, 24 de Mayo y Olmedo.

Calceta, inundado con lluvia de más de cinco horas

Más de cinco horas de lluvia que cayó la tarde y noche del lunes sobre el sector urbano de Calceta, del cantón Bolívar, provocaron inundaciones en varios sectores, pues se desbordaron los ríos Carrizal, Mosca y Trueno.

Nubia García, habitante de la ciudadela María Sol, contó que desde las 20:00 del lunes hasta las 06:00 de este martes, cuando bajó la intensidad de la lluvia, se inundó esta ciudadela y afectó a más de 60 viviendas; el sistema de alcantarillado se taponó y después el río Carrizal también se desbordó por el sector.

De la misma manera, en el sector de San Felipe, la calle 13 de Octubre también se inundó por la lluvia.

Carlos Franco, técnico municipal, dijo que la lluvia fue tan fuerte que el sistema de alcantarillado pluvial en varios sectores como María Sol, San Felipe, Camilo Ponce, La Karina, El Morro y parte del centro se obstruyó.

Personal municipal trabaja en la limpieza del sistema. También comentó que el río Carrizal aumentó su caudal y no permitió que el agua evacúe, sino que ingresó a los sectores bajos, por lo que sectores como Platanales y El Corozo, en la parte urbano-rural, resultaron inundados.

George Cevallos, jefe del Cuerpo de Bomberos, informó que el 40 % de Calceta se vio afectada por la creciente de estos ríos. “Necesitamos botes para monitorear la ciudad y saber a qué lugar destinar ayuda”, refirió, y añadió que aproximadamente 400 viviendas están afectadas por la inundación.

El aumento del caudal del río Carrizal, en 54 metros cúbicos por segundo, provocó la inundación.

Todo esto durante más de cinco horas de lluvia continua que soportó la ciudad.

Personal del Cuerpo de Bomberos llegó hasta el lugar para atender a los afectados.

Ramón Cedeño y Martha Rodríguez, de la ciudadela La Karina, contaron que a sus viviendas no entró el agua pero que alcanzó unos 40 centímetros en la parte de afuera.

A la casa de la familia Mera Moreira el agua ingresó y tuvieron que poner a buen recaudo sus enseres.

El COE cantonal tenía previsto reunirse para hacer un balance de las afectaciones y buscar soluciones.

Siete casas afectadas en la parroquia Tanicuchí, en Latacunga, provincia de Cotopaxi

LATACUNGA. Algunas viviendas de la parroquia Tanicuchí fueron afectadas por la fuerte lluvia acompañada de granizo que cayó la tarde del lunes. Foto: Wilson Pinto

Hasta casi un metro de altura subió el agua en siete casas de la parroquia Tanicuchí, Latacunga, provincia de Cotopaxi, luego de la intensa lluvia acompañada de granizo que cayó la tarde de este lunes. En el interior de las viviendas se observó que algunos enseres se encontraban bajo el agua.

María Rosa N., una de las afectadas, contó que por la fuerte lluvia la correntada que bajaba por la calle donde vive fue fuerte y que por esa razón inundó el cuarto en donde tenía animales como cuyes, pollos y conejos. Todos se murieron como consecuencia del agua acumulada.

Ella pidió ayuda porque no tiene ni un colchón para dormir y por esa razón iba a pedir albergue donde algún familiar.

Otra afectada aseguró que prácticamente la mitad de su casa se inundó. Se lamentó porque, según ella, no es la primera vez que les pasa algo así cuando hay una lluvia fuerte.

“La lluvia cayó durísimo, no paraba de llover, además de eso hubo granizada. Fueron alrededor de dos horas que llovía y por esa razón no tenemos dónde dormir, vamos a ir a dormir donde mi mamá hasta que se seque todo”, añadió consternada.

En rueda de prensa el jefe del Cuerpo de Bomberos de Latacunga, Ángel Baño, informó que la emergencia se alertó a través del ECU911 a las 16:26 del lunes, luego de lo cual siete efectivos con tres unidades asistieron a Tanicuchí con el fin de atender la situación.

Con bombas de succión se sacó el agua acumulada en las viviendas.

Indicó que el trabajo en las siete viviendas inundadas se prolongó hasta las 22:00. Aseguró que no hubo ninguna pérdida de vidas humanas, aunque los daños materiales sí se evidenciaron porque el agua subió de 70 centímetros hasta un metro, afectando los enseres.

El Oro

Calles y viviendas de varios barrios de Machala se anegaron debido a la lluvia que soportó la capital orense durante la noche del lunes y la mañana de este martes. En el resto de cantones orenses se reportaron deslaves en las vías.

“Estamos con las cosas sobre las sillas y las camas se mojaron, esto se repite todos los años” señaló Verónica Echeverría, habitante del barrio Venezuela, ubicado en el sur de Machala.

En el centro de la ciudad, la lluvia también dejó calles llenas de agua y los obreros de la empresa municipal Aguas Machala realizaron la limpieza de sumideros y ductos de alcantarillado.

En otros cantones de El Oro también se registraron emergencias por deslaves que obstaculizan el tránsito vehicular.

El alcalde del cantón Atahualpa dijo que existe un riesgo de un deslave en el cerro San José, además el tramo vial Buenavista - Paccha está en peligro de colapsar por un asentamiento de la carretera.(I)