Un militar que filtró información de una operación a la hija de un miembro del grupo Comandos de la Frontera continuará en prisión.

José Alfredo C. Z. formaba parte de un operativo realizado por una unidad de Quevedo. Los militares iban a ejecutar allanamientos en una hacienda que se presumía estaba vinculada a Comandos de la Frontera, donde se creía que había armas.

Publicidad

Cuando los uniformados llegaron al predio, no encontraron a nadie. Según las investigaciones, el militar filtró datos del operativo, lo que frustró los resultados.

Tras descubrirse la participación del teniente, de 27 años, este fue detenido y procesado.

Publicidad

Un juez lo halló culpable del delito de atentado contra la seguridad de las operaciones militares y policiales, y lo sentenció a cinco años de prisión.

Además, se le impuso una multa equivalente a diez salarios básicos unificados y se dispuso, como reparación por haber atentado contra la seguridad y la vida de varios compañeros de armas, que realice una disculpa pública.

El abogado del militar intentó dejar sin efecto la condena solicitando la suspensión condicional de la pena.

La suspensión condicional de la pena es un beneficio que consiste en el perdón de la primera falta cometida por una persona, cuyos antecedentes permiten presumir que es un delincuente ocasional con posibilidades de arrepentimiento, enmienda y readaptación social.

Sin embargo, en el transcurso del proceso, la defensa del teniente desistió de la solicitud.

La audiencia para resolver este pedido se realizó el 31 de julio pasado a las 14:30.

El juez consideró que el militar fue sentenciado por un delito tipificado como atentado contra la seguridad de las operaciones militares y policiales, el cual se encuentra entre aquellos que prohíben otorgar la suspensión condicional de la pena.

Por tal motivo, el juez negó la petición al tratarse de un delito contra la seguridad pública. (I)