El Centro de Convenciones Metropolitano, ubicado en el norte de Quito, fue escenario del primer día del 53.° Congreso Eucarístico Internacional (CEI) 2024. Bajo el lema “Fraternidad para sanar el mundo”, el evento reunió a más de 4.000 participantes de 53 países este lunes, 9 de septiembre, para reflexionar sobre el tema “Mundo herido. ¿Dónde está tu hermano?”.
La jornada comenzó con una eucaristía presidida por monseñor Jaime Spengler, arzobispo de Porto Alegre y presidente del Celam. Posteriormente, se desarrollaron conferencias y conversatorios que abordaron las diversas “heridas” que afectan a la sociedad actual.
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Dos de los ponentes del día fueron Pabel Muñoz, alcalde de Quito, y Rodrigo Guerra, secretario del Pontificio Consejo para América Latina. Ambos ofrecieron perspectivas críticas sobre los desafíos que enfrenta el mundo contemporáneo.
El alcalde Pabel Muñoz centró su intervención en los problemas derivados de un “sistema no cristiano”. Señaló que “el hambre, la pobreza, la desigualdad, la injusticia, la migración y la acumulación exacerbada de riqueza” son síntomas de sociedades que acumulan numerosos problemas.
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Muñoz también abordó la crisis medioambiental, advirtiendo sobre las consecuencias del maltrato a la naturaleza.
“Si no nos damos cuenta de cómo está reaccionando la naturaleza con sequías, con inundaciones, con calentamientos, con enfriamientos de distintas partes, no vamos a entender que también este acelerado proceso de generación de riqueza ha lastimado mucho a la naturaleza”, expresó.
Quito recibe más de 4.000 personas por el Congreso Eucarístico Internacional
Por su parte, Rodrigo Guerra ofreció una reflexión sobre los desafíos que enfrentan las democracias modernas. Citando al papa Francisco, Guerra advirtió que “nuestras democracias se están enfermando y que en algunas ocasiones devienen en populismo”.
Definió el populismo como el uso del poder en contra de la propia democracia y en contra del propio pueblo, manipulándolo, “dándole pan y circo, prometiendo cosas que no se cumplen, reformando la constitución a su modo, reinventando la historia nacional”.
Guerra también abordó el tema del clericalismo dentro de la Iglesia, describiéndolo como “la subordinación indebida del pueblo de Dios a la jerarquía de Iglesia central”. Hizo un llamado a reaprender a tratarse como hermanos y escuchar más.
Ambos ponentes coincidieron en la importancia de abordar el problema de las fake news y el mal uso de la información en las redes sociales. Señalaron que este fenómeno contribuye al deterioro de la democracia y al enfrentamiento entre ciudadanos.
El Congreso Eucarístico Internacional continuará hasta el 15 de septiembre, explorando diversos aspectos de la fe y su relación con los desafíos sociales contemporáneos.
Aunque el papa Francisco no pudo asistir debido a compromisos previos en Asia, el evento cuenta con la presencia del cardenal Baltazar Porras como legado pontificio. (I)