Los sectores que podrían entrar en el pago de compensaciones por la liberación de los precios de las gasolinas extra y ecopaís en Ecuador, para lo cual aún no hay una fecha definida por parte del Gobierno, hacen sus cálculos sobre cómo puede ser este proceso, aunque también advierten algunos riesgos.
Por ejemplo, el sector agroproductor, a través del presidente de la Corporación Nacional de Organizaciones de Productores Arroceros (Corpnoarroz), Javier Ronquillo, sugirió que se utilice el RUC (Registro Único de Contribuyente) del productor para asignar las compensaciones a los propietarios de camionetas (rurales) que por el momento han sido identificados por el Ministerio de Energía como futuros beneficiarios, junto con los taxis y los motores fuera de borda.
Actualmente, las gasolinas ecopaís, extra y el diésel tienen los precios congelados y subsidiados. El valor del subsidio por galón de gasolina extra es de casi $ 0,59 y en el galón de ecopaís es mayor: $ 0,80, según datos de Petroecuador. Mientras, el precio de la gasolina súper está liberado, es decir, no tiene subsidio.
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Al respecto, Kléber Sigüenza, presidente de la Cámara de Agricultura de la II Zona, cree que la idea de utilizar el RUC de los productores para asignar la compensación es una buena alternativa, aunque también indicó que existen riesgos. “Puede ser una buena idea que ojalá pueda ser implementada en la práctica, pues sabemos que las excepciones a la regla generan corrupción y fugas”, dijo.
Ronquillo indicó que la mayor parte de las zonas rurales utilizan camionetas de más de 2.500 c. c., que son usadas para mover insumos, equipos, personas, asimismo para la cosecha de los productos finales hacia los centros de acopio, mercados de las ciudades.
“No debería afectar el precio de compra al productor y muy mínimamente el precio de venta al consumidor”
Por su parte, Sigüenza considera que el impacto de la liberación de los precios de las gasolinas en el agro, en el caso de las camionetas, será bajo.
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Según el titular de la Cámara de Agricultura de la II Zona, el 90 % de la transportación masiva de productos agropecuarios se hace en camiones de diésel, mientras que las camionetas, que las hay de diésel y gasolina en una relación por igual, se utilizan para transportar pequeñas cantidades de productos y en distancias cortas con bajo consumo de gasolina.
“Por tanto, considerando que el incremento será del orden de un 20 %, el impacto en el costo de transporte será muy bajo y no debería afectar el precio de compra al productor y muy mínimamente el precio de venta al consumidor”, analizó Sigüenza.
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Sin embargo, cree que para contrarrestar el incremento de costos por la eliminación de subsidios, y para evitar que la producción disminuya o que los productos suban de precio al consumidor, el Estado debe eliminar o disminuir tasas, trámites, multas y contribuciones a los gobiernos autónomos descentralizados (GAD), Superintendencias, Comisión de Tránsito, Cuerpos de Bomberos, etc., que por el contrario, según el dirigente, tratan de incrementarlas permanentemente, deteriorando la productividad. (I)
