El censo que se realizará en Ecuador en el 2022 -después de doce años y de una pandemia- trae novedades y preguntas que por primera vez se les harán a los ecuatorianos: si a partir de enero del 2020 alguien de la familia murió de COVID-19, si en el hogar hay perros y gatos, o si la persona censada siente atracción sexual o romántica por hombres, mujeres, por ambos u otro.