El manejo del dinero requiere disciplina y responsabilidad. A esas dos cualidades se les debe agregar algo de conocimiento, que de acuerdo a Esteban Correa, subgerente comercial de la cooperativa de ahorros Andalucía, es imprescindible para entender las finanzas personales sin ser experto.

Conocer estos conceptos ayudará a tener un mejor control de los gastos y evitará errores comunes como el despilfarro o sobreendeudamiento.

“Sin duda, el conocimiento de las finanzas personales contribuyen al crecimiento financiero de las personas, ya que ayudan a forjar buenos hábitos económicos y permitirán tomar decisiones financieras acertadas. Además, una adecuada administración del dinero hará que alcancemos nuestras metas propuestas con mayor facilidad”, explica Correa.

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Estos son algunos de los conceptos y términos básicos de las finanzas saludables:

  1. Presupuesto: consiste en registrar el dinero con el que se cuenta y destinar rubros para los gastos previstos. Se refiere a los ingresos y gastos y ayuda a tener un mejor control del dinero, al prever la cantidad que se necesita para cumplir cualquier tipo de responsabilidad económica y a limitar o recortar gastos innecesarios.
  2. Capacidad adquisitiva personal: Es la cantidad de dinero con el que cuenta una persona para satisfacer la adquisición de bienes o servicios, así como para cubrir todos sus gastos como servicios básicos, deudas, etc. Siempre es importante tener claro la capacidad adquisitiva antes de adquirir nuevas obligaciones financieras que corren el riesgo de no ser cubiertas con un manejo inadecuado del dinero.
  3. Liquidez: Es la capacidad de dinero en efectivo con el que se cuenta para hacer frente a obligaciones o responsabilidades financieras.
  4. Activos: Son los bienes con los que cuenta una persona y que tienen una vida útil larga. Por ejemplo, una casa, menaje del hogar, terrenos, vehículos, entre otros.
  5. Pasivos: Corresponden a las deudas a terceros, ya sea con entidades financieras, familiares, amigos, etc. “Un ejemplo de pasivos es el préstamo, al adquirirlo estamos en la obligación de pagar el principal monto, junto con los intereses al proveedor”, explica el ejecutivo de Andalucía.
  6. Pago corriente: Es la cancelación del monto total de una deuda asumida mediante una tarjeta de crédito, es decir, debe ser cubierto con un solo pago en el siguiente estado de cuenta que se genere en la tarjeta.
  7. Pago diferido: Consiste en dividir el monto total de una compra, realizada mediante crédito directo o tarjeta de crédito, en varias cuotas, ya sea 3, 6, 12 meses, con o sin intereses. “Aquí recomendamos tener precaución, ofertas como el compre hoy y pague después de dos o tres meses, sólo harán que acumulemos gastos y atraigamos más endeudamiento a nuestra economía diaria”, detalla el funcionario de Andalucía.
  8. Periodo de gracia: Es un plazo de tiempo que se acuerda con una entidad, antes de iniciar el pago de un crédito, en donde no se debe pagar ninguna cuota, pero aunque suena como una atractiva alternativa, se debe tener en cuenta que puede generar intereses que igual deberán cancelarse en las siguientes cuotas del crédito.
  9. Tasa de interés: Equivale a un valor determinado que se debe cancelar al acceder a un monto de dinero mediante crédito y en un período de tiempo.
  10. Historial crediticio: Es el registro del comportamiento de pago ante las entidades financieras, en donde se detalla la información de los créditos realizados, los saldos pendientes y la puntualidad en el pago. Este registro lo usan los bancos o cooperativas para el análisis del otorgamiento de créditos o productos financieros.

A estos términos económicos hay que sumar el hábito del ahorro que debe ser una constante que se incluya en el presupuesto. Acostúmbrese a ahorrar algo cada mes, aunque no siempre pueda ser el 10% que los expertos financieros aconsejan. (I)