Reciclar 100 millones de toneladas de desechos y subproductos para obtener energía y materias primas, incrementar el uso de arcilla calcinada, desarrollar cementos con nuevos aglutinantes, duplicar combustibles derivados de residuos en la producción y operar su primera planta de producción de cemento con cero emisiones de CO2 son las metas de Holcim Latinoamérica para el 2030.

Esta ruta se ha trazado en el marco de su compromiso global de Net Zero como parte de la “Ambición empresarial por 1,5 °C” del Pacto Global de las Naciones Unidas. La iniciativa está basada en Science Based Targets (SBTi), objetivos centrados en la ciencia, y busca que las empresas firmantes dirijan sus metas de sostenibilidad para limitar el calentamiento global.

Con esto, Holcim es la “primera empresa cementera del mundo” en establecer estos objetivos. “En nuestro camino para convertirnos en una empresa Net Zero no solo somos parte de la solución, también estamos comprometidos a apoyar a nuestros clientes en sus ambiciones de reducción de CO2. Ninguna empresa puede abordar el desafío climático por sí sola, por eso nos asociamos”, indica Jan Jenisch, CEO de Holcim.

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Por su parte, Alberto Carrillo, representante de SBTi en CDP Alemania, afirma que están “complacidos” de que la cementera se haya unido al grupo de más de 290 empresas que están comprometidas con un futuro de 1,5 °C.

Otro de los objetivos de Holcim es alcanzar los 475 kilogramos de CO2 neto por tonelada de cemento. “Holcim Latinoamérica ya comenzó su camino Net Zero acelerando el uso de productos bajos en carbono y carbono neutro, como ECOPact”, dice Oliver Osswald, de Latam Holcim.

Según las Naciones Unidas, las ambiciosas medidas de las empresas ayudan a que se perciban señales claras del mercado y deberían dar a los Gobiernos la confianza necesaria para ampliar urgentemente sus planes climáticos nacionales, incluidas las contribuciones determinadas a nivel nacional (conocidas por sus siglas en inglés como NDC) y las estrategias a largo plazo, de acuerdo con los últimos datos científicos.

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Además, añade el ente internacional, al establecer políticas y metas acordes con una trayectoria hacia el límite de 1,5 °C, los Estados proporcionan a las empresas la claridad y la confianza que necesitan para invertir en las economías sin emisiones de carbono del futuro. (I)