Roberto, de 16 años de edad, desarrolló un trastorno psicótico con alucinaciones durante el primer mes del periodo de abstinencia por la adicción a los juegos virtuales. El paciente contó esta semana en la cita psiquiátrica, en Guayaquil, que una voz le repetía que no dejara de jugar, que moriría si se detenía y que lo afligía recaer.