Aunque la Organización Mundial de la Salud (OMS) todavía no dispone de cifras concretas sobre tendencias mundiales, está siguiendo la información que se está dando en varios países sobre un aumento de intentos de suicidio o abuso de sustancias, como consecuencias para la salud mental que está teniendo el coronavirus en el mundo, e instó a los gobiernos a no dejar de lado la atención psicológica.