Luego de pedir perdón a su familia, a la familia de Laura Terán y al pueblo ecuatoriano, la exasesora de la Presidencia, Pamela Martínez, confirmó la mañana de este martes que creó archivos para manejos de campaña electoral, que manejó -recibiendo y entregando- dinero en efectivo y cruce de facturas de empresas que aportaron recursos para el movimiento Alianza PAIS.

Martínez, durante su testimonio anticipado dentro del caso Sobornos 2012-2016, que duró más de una hora, lloró por varias ocasiones y dijo que "la ninguna experiencia política y el no darse cuenta de que la estaban utilizando la llevaron a cometer errores y a esta situación". 

La exasesora presidencial de Rafael Correa confirmó que los dineros que entregó en esta trama mediante sobres a Alexis Mera y Viviana Bonilla provenían de Odebrecht; mientras que los dineros que entregó a la exministra María de los Ángeles Duarte, a través de su emisario, Yamil Massuh, también en sobres provenían de dineros de las empresas Equitesa y Odebrecht. 

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A Mera, mediante su asesor Pedro Espinosa, dijo Martínez, le entregó la cantidad de $200.000; a Bonilla, mediante sus emisarios Gustavo Bucaram y Christian Viteri, $300.000; y a Duarte $300.000.

Jorge Glas, según Pamela Martínez, es el funcionario que le habría dicho que ella debía recibir dineros de empresas como Odebrecht, Fopeca, Sanrib, Equitesa, SK, Azul e Hidalgo e Hidalgo. 

Dineros de Odebrecht

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También reconoció que sin autorización o consentimiento de los accionistas de la empresa NexoGlobal facilitó facturas a Odebrecht para justificar los dineros que esta empresa estaba entregando. Los sobres que venían de Odebrecht con dinero habrían sido entregados por Geraldo de Souza y en alguna ocasión también estuvo presente José Santos.

Momentos con Correa

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Pamela Martínez sostiene que ante sus sospechas de que la visita del abogado ya fallecido José Alvear Icaza, quien le dijo que no había traído el dinero porque aún no se había puesto de acuerdo en el porcentaje, se trataba de una coima, ella le comentó todo a Rafael Correa en su despacho. Para escuchar lo que quería decirle Martínez, Correa le habría pedido que se siente en un sillón de cuero y le cuente todo al oído. 

La respuesta de Correa al escuchar lo que se le denunciaba habría sido, dijo Martínez, "tranquila, tranquila, ha de ser una confusión". 

Otro momento relacionado a Correa, comentado por Martínez, fue que él la habría llamado en el 2017 para preguntarle si se había destruido la información.

La audiencia de testimonio anticipado concluyó. La Fiscalía no realizó preguntas, mientras que la defensa de la procesada Martínez, Édgar Molina, le hizo ocho preguntas.

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Martínez no contestó preguntas a ninguna de las restantes partes procesales. (I)