Mientras desarrolladores sospechan que el programa espía de Hacking Team (HT) sigue funcionando, la Secretaría Nacional de Inteligencia de Ecuador (Senain) no ha confirmado si terminó o no su relación con esta empresa italiana.

EL UNIVERSO ha solicitado una entrevista con la Senain desde la semana pasada, pero no ha sido aceptada.

Una fuente gubernamental aseguró a EL UNIVERSO que la decisión del presidente Lenín Moreno de anunciar la desaparición de la Senain se debió a los resultados del primer informe presentado por su actual titular, Jorge Costa, el lunes 19 de marzo. La investigación de Costa sigue su curso, añadió.

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De acuerdo con los únicos tres documentos del contrato filtrados, la Senain adquirió licencias para usar el programa Remote Control System de Hacking Team.

La compra fue para tres años con un total de 30 paquetes para infectar y vigilar computadoras con programas Windows y MacOS, así como teléfonos Android, iPhone, BlackBerry y Symbian. Se incluyeron vectores para infectar los equipos físicamente y a distancia, además del mantenimiento y actualización del programa.

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El negocio contempló una capacitación en Italia para cuatro agentes, en tanto que la colombiana Robotec daba el servicio de soporte en Quito y el entrenamiento básico de análisis de inteligencia para doce personas. Robotec no ha contestado un pedido de entrevista realizado por EL UNIVERSO.

A inicios de marzo, en el portal WeLiveSecurity se publicó un artículo alertando de que el programa espía de HT sigue evolucionando, posiblemente por cambios hechos por sus creadores y estaría presente en catorce países.

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El artículo no reveló todas las pistas, pues el autor aún estudia las variantes del código.

Si bien fue golpeada por el hackeo de sus correos en julio del 2015, HT no ha cerrado sus puertas. Vendió el 20 % de sus acciones a la chipriota Tablem Limited, que tendría relación con Arabia Saudita.

En una entrevista de hace dos años, Vincenzetti describió su programa de espionaje como “magia negra”: puede interceptar todo y desencriptar todo. Para el expirata informático ahora convertido en empresario, la seguridad nacional es lo más importante. Por eso ofrece su programa a los gobiernos de Italia, España o Estados Unidos. Sus problemas comenzaron cuando el programa fue vendido a países que lo usaron para espiar a activistas u opositores políticos, como Marruecos o Sudán. Por ello ha sido denunciado por organizaciones defensoras de derechos humanos. La publicación de los correos de HT reveló que la lista de clientes incluía Etiopía, Egipto, Rusia, Arabia Saudita, Panamá, México y Ecuador.

En esa entrevista, el italiano afirmó que Marruecos sigue siendo su cliente. Cuando el periodista le preguntó si gracias al hackeo de sus correos, HT había mejorado sus productos, la respuesta de Vincenzetti fue una sonrisa avergonzada. (I)

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