Cuando a más de 60 representantes de los sectores y barrios de Guayaquil, Durán y Samborondón les preguntaron cuál era el principal problema en cuanto a seguridad, la respuesta fue unánime: las drogas.

El Ministerio del Interior obtuvo ese resultado no solo en la zona 8 (que integran los tres cantones citados) sino prácticamente a nivel nacional.

Xavier Vítores, subsecretario de Evaluación y Estudios de esa entidad, admite que problemas como la delincuencia o el maltrato intrafamiliar pasaron a segundo plano respecto al temor que sienten los padres al microtráfico en espacios educativos.

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Vítores ha recorrido provincias del país realizando encuestas sobre seguridad y otros ámbitos sociales, cuyos resultados serán tabulados y serán la hoja de ruta para empezar a trabajar en el Plan Nacional de Desarrollo propuesta del Gobierno, en la que se prevé establecer directrices en el marco de una planificación hasta el 2025.

En la reunión realizada en el tercer piso del Gobierno Zonal, en Guayaquil, el martes pasado, algunos líderes barriales propusieron la eliminación de la tabla de consumo. Benedita Figueroa, representante de Mapasingue, argumentó que cada vez eran más “las generaciones perdidas”, y pidió la implementación urgente de un plan de desintoxicación.

Griselda Zarco, de Monte Sinaí, comentó que la delincuencia en su sector se ha incrementado por las drogas, pues alegó que quienes no tienen dinero para la compra de estupefacientes cometen asaltos.

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José Castillo, representante de la isla Trinitaria, aseguró que a pesar de la creación de Unidades de Policía Comunitaria, su zona es peligrosa. A él, además del consumo, le preocupa las constantes muertes violentas que ocurren en su sector, en el sur de Guayaquil.

De la violencia intrafamiliar y violencia de género también se habló en el encuentro. Nancy Menéndez, dirigente del cantón Durán, expuso la necesidad de “trabajar desde adentro hacia afuera”. Consideró que los policías y líderes comunitarios deben dominar estas temáticas sociales, para que supuestamente puedan asistir de manera óptima a las víctimas.

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Otro tema al que se refirieron fue la situación de los extranjeros que incurren en diferentes tipos de delitos en territorio ecuatoriano. Marielisa Baque, habitante de Bastión Popular, propuso que las personas de otros países que delinquen deberían ser devueltas a sus naciones de origen para que allá cumplan sus sentencias.

Refirió que así habría un ahorro o liberación de recursos que podrían ser invertidos en programas que beneficien a niños y jóvenes inmersos en el problema de drogadicción.

Las reuniones se han efectuado en Ibarra, Ambato, Cuenca, Machala, Tena, entre otros cantones. Según Vítores, representante del Ministerio del Interior, a partir de mayo habría resultados y con ello, definición de estrategias para combatir las principales problemáticas.(I)

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Años es la edad promedio del primer consumo, según encuesta publicada el año anterior por la Seted.

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La mayor preocupación es el tema del microtráfico en espacios educativos, ese fue básicamente el pedido de la ciudadanía en términos de las amenazas que está enfrentando Guayaquil, incluso más que la delincuencia o el maltrato intrafamiliar”.Xavier Vítores, Representante del Ministerio del Interior