Los abrazos fueron interminables para Soledad Castro, después de que a su casa, ubicada en el barrio Santa Clara, de Manta, llegaran la madrugada de ayer los cadáveres de su esposo, William López, de 44 años, y el de su hijo, Geovanny López Castro, de 26, que fueron asesinados el pasado 16 de enero en Caracas, Venezuela.

Otras dos personas, entre ellas el ecuatoriano Yandri Solórzano, de 40 años, también murieron en el mismo ataque, ocurrido en los exteriores de la Terminal Internacional de Buses de la capital venezolana.

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El hecho dejó cinco heridos, entre ellos el hijo de Solórzano, quien junto al resto fue llevado a una casa asistencial.

Allegados de las víctimas, basados en reportes de prensa de Venezuela, conocieron que el día de la tragedia, un hombre se le había acercado a William López y pedido insistentemente un encendedor.

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Ante la negativa del ecuatoriano, el sujeto tomó dos armas de fuego que estaban en poder de su compañero y disparó. “Disparó contra todos los que estábamos allí y mató a cuatro”, dijo uno de los parientes de las víctimas, según diario El Universal de Venezuela.

En medio de la tristeza, Soledad dice que siente un poco de tranquilidad por haber traído al país los restos de sus familiares, pues le angustiaba la idea de que estos quedaran en un país en el que ella vivió algún tiempo y al que ahora no piensa regresar.

“Pienso quedarme en Ecuador”, respondió Castro cuando se le consultó sobre su futuro y el de los otros dos hijos que procreó con William López.

Mientras tanto, en la casa de caña guadúa que hace 10 años construyó Yandri Solórzano Morrillo en la parroquia La Pila, del cantón Montecristi, los gritos de dolor fueron casi interminables cuando a las 03:00 de ayer llegaron sus restos.

Era oriundo de Santa Ana y hace 8 años decidió migrar a Caracas en busca de un mejor futuro para su familia. No obstante, hoy dos hijos han quedado en orfandad.

Temilda Morrillo, madre de Yandri, explicó que ella y sus familiares acordaron velar por los menores, uno de ellos aún en Caracas, Venezuela, junto con su progenitora. El mayor, de 9 años, vive en La Pila.

“Nosotros le decimos a la mamá (viuda de Yandri), que no se preocupe, que ella no queda sola, estamos para ayudarnos en cualquier cosa”, dijo Temilda.

Los cuerpos de los tres manabitas asesinados serán sepultados el lunes al mediodía, informaron familiares. Yandri Solórzano será llevado a Ayacucho, mientras que William López y su hijo Geovanny serán inhumados en Manta. (I)

Investigación
Detenido

Los deudos esperan que las autoridades venezolanas investiguen el hecho. Uno de los sujetos que habría participado en el tiroteo fue detenido, el otro huyó a pie tras chocar el carro de Geovanny López, al querer robarle.

Ya están aquí; como digo, alegre porque están aquí y tristes porque se van al cielo. Agradezco al Ministerio de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana por la ayuda en todo.Soledad Castro, viuda