Nuestros dispositivos tienen fecha de caducidad, y lo más probable es que mueran en los próximos años. Geoffrey A. Fowler, un columnista del Washington Post, analizó la vida útil de 14 dispositivos electrónicos y confirmó que la mayoría no duraría más de 4 años.

¿Por qué ‘expiran’ nuestros aparatos electrónicos? Esta es una pregunta que se la debemos realizar a las grandes empresas, como Apple, Samsung, Google, Amazon, entre otras, que manufacturan dispositivos con baterías que funcionan por un corto período de tiempo.

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Kyle Wiens, el CEO de una comunidad de reparación de tecnología, dijo que “casi cada dispositivo estos días tiene una batería que se va a gastar y es como una bomba de tiempo integrada”. Fowler explicó que esta es una estrategia de las marcas para que consumamos más productos cada vez que se nos daña uno, algo que causa serios problemas para nuestro bolsillo y para el medio ambiente.

Por eso, el autor se contactó con las empresas tecnológicas y con expertos en dispositivos electrónicos para determinar la fecha de caducidad de 14 aparatos populares. Estos son algunos de los que encontró:

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Foto: Archivo
  • Airpods ($179): Apple no reemplaza las baterías de sus audífonos inalámbricos, solo ofrecen la venta de un nuevo par. Su estimado de vida útil es de 2 años.
  • Apple Iphone: La vida de su batería es de 3 años, pero puede ser reemplazada en las tiendas oficiales por $69.
  • MacBook Air: La laptop de Apple está diseñada para durar 4 años, tras lo cual la empresa ofrece un servicio de cambio de batería por $129.
  • Nintendo Switch: El popular videojuego de Nintendo tiene una batería que solo funciona por 3 años, tras lo cual empieza a tener fallas en su sistema.

De acuerdo con Fowler, una de las maneras de hacerle frente a las compañías que venden dispositivos electrónicos diseñados para caducar pronto es exigiéndoles información sobre la capacidad de su batería, además de permitir a los usuarios reparar sus dispositivos.

“Significa que incluso si una batería está sellada dentro de un producto, el fabricante debe vender repuestos y compartir instrucciones sobre cómo repararlo”, indica Fowler. “Tenemos que luchar contra la máquina de marketing que hace que un ciclo anual de actualizaciones de productos se sienta como algo más que puro consumismo”.

“Es bueno que la tecnología ahora sea más accesible. Pero si no podemos simplemente reemplazar la batería en algo que poseemos, ¿realmente nos pertenece?”, concluye.