En la Iglesia Católica, el Adviento es el primer período del año litúrgico, pues empieza un domingo después de la Solemnidad de Cristo.
Esta tradición es practicada por los fieles como una forma de preparse para el nacimiento de Jesús. En esta época de penitencia, los creyentes reflexionan y meditan sobre los valores del amor, la paz y la alegría.
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La tradición del Adviento comienza cuatro domingos antes de Navidad, y en cada ceremonia semanal se van encendiendo las velas correspondientes a cada domingo. Son cinco velas en total: cuatro de color morado, una de color rosado y una de color blanco.
El primer domingo de Adviento de este 2024 cae el 1 de diciembre. Este día se prende la primera vela y se reza una oración, que puede ser hecha en familia o amigos.
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El portal ACI Prensa propone una oración para esta ocasión.
Primer Domingo de Adviento: La promesa de salvación
Para empezar: En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Explicación: Adán y Eva se dejaron engañar por el demonio al pensar que podían saber más que Dios y hacer lo que Él había prohibido. Así comenzó el pecado en el mundo y todo se volvió oscuridad para el hombre, pues el pecado nos aleja de Dios. Pero Dios prometió enviarnos un Salvador.
Vela: Se enciende la primera vela, que es la vela del arrepentimiento. El color de la vela nos recuerda que es un tiempo de penitencia, de conversión.
Oración: Que esta corona nos ayude a preparar los corazones de cada uno de los que formamos la familia para tu llegada el día de Navidad. Te lo pedimos, Señor.
Para terminar: Te damos gracias, Señor, por mandarnos a tu Hijo a salvarnos y te pedimos ayuda para preparar nuestro corazón para la venida de Cristo. Amén.
Canto:
Ven, Ven, Señor, no tardes
Ven, ven, que te esperamos
Ven, ven, Señor, no tardes
Ven, pronto Señor.
El mundo muere de frío,
el alma perdió el calor;
los hombres no son hermanos
el mundo no tiene amor.
Envuelto en sombría noche,
el mundo sin paz no ve,
buscando va una esperanza,
buscando, Señor, tu fe.
Al mundo le falta vida,
al mundo le falta luz,
al mundo le falta el cielo,
al mundo le faltas Tú.
Todos: En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. (I)