La semana pasada la popular presentadora ecuatoriana de televisión Alejandra Jaramillo protagonizó una polémica en redes sociales, luego de unas declaraciones que compartió con sus seguidores. La conductora esmeraldeña dirigió una transmisión en vivo, de una hora, en la cual afirmó que el sol no da cáncer, sino que lo cura.

En el clip, disponible en su perfil de Instagram, Jaramillo aborda este tema con el autor español Carlos Stro, quien de hecho aclara que su contenido virtual “no es consejo de salud”, además, ninguno de los dos es profesional de la medicina.

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En su diálogo, Jaramillo y su invitado reflexionaron sobre la importancia del sol y cuestionaron las prácticas médicas, las cuales, a decir de ellos, favorecen a las industrias farmacéutica y cosmética, en el consumo de protectores solares y bloqueadores. Estas posiciones le trajeron las críticas de algunos usuarios, que tacharon como desinformación lo difundido por ambos.

Alejandra Jaramillo: Me reafirmo y me mantengo, el sol no da cáncer

La importancia de tomar sol

Cinco días después, la panelista de Siéntese quien pueda (Univisión) se reafirmó en lo dicho, aunque aclaró que supuestamente se refería a salir a tomar el sol por 20 minutos cada día, como ella lo hace diariamente y que eso no da cáncer. “Nadie les dijo que salgan a exponerse al sol por 10 horas como focas en Galápagos”, expresó.

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También explicó que tomar sol en este lapso, al contrario de dar cáncer, “regula neurotransmisores como la melatonina y la serotonina, ayudándote a dormir mejor, a tener mejor energía, eso y tantos beneficios más”.

Para la cosmetóloga Martha Romero, no es del todo descabellado lo que dice Alejandra Jaramillo, agregando que la sobreexposición al sol es lo perjudicial. “Si no tomamos sol, no generamos vitamina D y no absorbemos el mineral (relacionado con esa vitamina). Entonces se crea un ciclo negativo, donde realmente podemos comer muchas cosas, pero no tenemos esa herramienta que nos la da el sol para absorber lo que se necesita del alimento que estamos consumiendo”, ilustra.

“Definitivamente Dios creó al sol con una razón, que es la de dar vida. Obviamente la sobreexposición sí es perjudicial, pero lo que ella dice está súper bien, porque es un sol que se toma muy temprano, al despertarse, y es lo correcto. Todo el mundo debería levantarse y tomar 5 minutos de sol”.

En padecimientos como la psoriasis, el vitiligo, la ictericia neonatal, la fototerapia (la exposición controlada a la luz solar, entre las 8:00 y las10:00) es igualmente favorecedora, porque ayuda a repigmentar la piel, resalta la dermatóloga Verónica Solís. Pero eso no significa que se recomienda a un paciente buscar el sol del mediodía y sin protección solar, porque lo más probable es que termine con afectaciones, como ampollas.

¿Hay problemas con los bloqueadores solares?

Bloqueadores solares.

En el 2021 la farmacéutica Johnson & Johnson retiró del mercado cinco productos de protección solar en aerosol de las marcas Aveeno y Neutrogena, después de detectar pequeñas cantidades de benceno, una sustancia que potencialmente podría causar cáncer, según el nivel y el alcance de la exposición.

Desde ese entonces no se ha conocido otro tipo de controversia en este sentido. Aunque ni la influencer esmeraldeña ni su entrevistado se refirieron a ese asunto, sí es real que un sector de la sociedad ha puesto bajo la lupa a los protectores o bloqueadores solares.

A decir de la cosmetóloga Romero, mientras menos expongamos nuestra piel a los químicos, mejor es para la salud en general de nuestro cuerpo, y eso aplica a todo tipo de producto. “Se sabe que hay ingredientes o principios activos que están en los bloqueadores que no deberían ser consumidos constantemente, porque son disruptores hormonales”, alerta la especialista a partir de sus investigaciones. Para ella, los mejores productos en este sentido son los provenientes de la comunidad europea, que en su visión, se esfuerza más por regular sus producciones.

Aunque no conoce este tipo de casos todavía, la dermatóloga Solís reconoce que lo ideal es usar los productos destinados para cada edad, porque se está viendo una relación entre pubertad precoz y uso de cosméticos en niñas. “A una niña no le se puede poner protector solar de un adulto. Los niños deben usar productos para niños. Hay algo que sí ocurre. Las niñas que usan cremas o splashes de mujeres, se le puede acelerar la pubertad. Hay muchos casos de pubertad precoz, a los 9, 10 años, porque las niñas usan productos de sus mamás. Hay que tener cuidado con eso”.

En todo caso, la doctora Solís recuerda que la fotoprotección solar no solo implica el uso de bloqueadores solares, sino también los medios físicos para bloquear los rayos solares, como buscar la sombra en exteriores, vestir gafas, sombreros de ala ancha, prendas con mangas y bastas largas, que cubran las extremidades.

Pero la mejor manera conocida para prevenir quemaduras en la piel, en las horas de mayor radiación solar, como al mediodía, es usando protector solar. Es necesario. “Usando el que mejor sientan, no por la marca. Si no les huele mal, el que mejor se adapte a su piel, con o sin color, con el factor que prefieran, porque la diferencia es baja, todos tienen una eficacia de más del 90%”, recalca Solís. “Hay que aplicarse protector hasta en las orejas, que los hombres suelen descuidar a diferencia de las mujeres, que el cabello les cubre”.

¿El sol causa cáncer?

Sí, la respuesta es muy clara. El sol sí causa cáncer de piel. Así lo afirman la dermatóloga Verónica Solís y Raúl Oleas Chávez, cirujano-oncólogo y transplantólogo especializado en Francia y Corea del Sur. “El riesgo de tener cáncer de piel va directamente relacionado con la exposición a los rayos ultravioletas, que obviamente hacen parte de la luz solar”, expresa Oleas.

Foto: Shutterstock.

Según Oleas, los rayos ultravioletas, con una determinada frecuencia, son peligrosos porque alteran el funcionamiento normal del material genético de las células en nuestra piel. Aparte del tiempo de exposición a estos rayos, el factor genético también juega un rol relevante en la causa de este tipo de cáncer. Por ejemplo, mientras más blanca sea la persona, puede tener mayor tendencia a presentar la enfermedad.

Existen dos tipos de cáncer de piel: el melanoma y el no melanoma. El primero proviene de los melanocitos (las células que le dan color a la piel), y el segundo que se forma en la parte más interior de la epidermis o en las células escamosas. El no melanoma además se subdivide en carcinoma basocelular (el más frecuente y menos riesgo mortal) y el escamocelular, que es más agresivo.“Dos de tres cáncer diagnosticados a nivel mundial son de piel”, señala Solís.

Ambos expertos aclaran que, a pesar de ser dos diferentes tipos, ambos están directamente relacionados con el tiempo que nos exponemos al sol. La doctora Verónica Solís incluso advierte que haber experimentado dos quemaduras solares intensas antes de los 20 años aumenta el riesgo de desarrollar cáncer de piel en un 80%.

¿Cómo reconocer el cáncer de piel?

Los pacientes oncológicos deben cuidar su piel con protector solar en todo momento. Foto: Shutterstock

Se reconoce a través del estudio de lesiones premalignas, estas son alteraciones de la piel en la coloración o superficie, que nos pueden hacer pensar que se podría desarrollar un cáncer.

“El cáncer de piel es una lesión pigmentada, eso quiere decir oscura, pero hay casos donde los melanomas pueden ser completamente blancos. Estos melanomas se identifican porque son lesiones nuevas, no son como los lunares que hemos tenido toda la vida. Estas lesiones pigmentarias crecen rápidamente y pueden producir picazón. Cuando el paciente se rasca estas lesiones notará que son de sangrado fácil, se lastiman con facilidad. Estas son características de un posible tumor o cáncer de piel”, ilustra el doctor Oleas.

¿Qué hacer después de un diagnóstico de cáncer de piel?

“Hay que intentar hacer un diagnóstico lo antes posible, no podemos dejar pasar lesiones anormales en la piel sin que sean analizadas, estudiadas o eventualmente biopsiadas. Biopsiadas significa que se retira una pequeña porción de estas lesiones para ser analizadas por el patólogo”, detalla Oleas.

Luego de este procedimiento, si se encuentra cáncer, se debe retirar la lesión de forma completa. “El tratamiento para esta enfermedad básicamente está sustentado en una buena cirugía, o sea, en una retirada del tumor de piel con margen de seguridad, posteriormente se hace una pequeña reconstrucción del sitio donde se retiró”, dice.

El siguiente paso es un tratamiento personalizado y específico para el tipo de cáncer de piel que el paciente pueda presentar. Para el tipo melanoma en etapas avanzadas, se realizan inmunoterapias o quimioterapias, y para el no melanoma, radioterapias. En ninguno de los dos casos se conoce que la exposición solar los cure. (I)