<i>Yo jamás sufrí, yo jamás lloré</i><i>Yo era muy feliz, yo vivía muy bien</i><i>Hasta que te conocí</i><i>Vi la vida con dolor</i><i>No te miento fui feliz</i><i>Aunque con muy poco amor</i><i>Y muy tarde comprendí</i><i>Que no te debía amar</i><i>Porque ahora pienso en ti</i><i>Más que ayer, mucho más</i><i>Ahora quiero que me digas</i><i>Si valía o no la pena</i><i>Haberte conocido</i><i>Porque no te creo más</i><i>Y es que tú fuiste muy mala</i><i>Sí, muy mala conmigo</i><i>Por eso no te quiero</i><i>No te quiero ver jamás</i><i>Vete, vete, vete, vete</i><i>Vete de mi pena</i><i>Vete, no te quiero</i><i>No te quiero ver jamás</i>J. G.Estas letras exploran la profunda introspección de<b> una persona que ha experimentado el amor y la pérdida.</b> Desde un punto de vista psicológico revela gran variedad de estados emocionales, desde la paz, pasando por una relación intensa, hasta la aceptación del dolor, <b>explicando de manera poética la etapa del duelo.</b>El amor apasionado transforma la vida en el aspecto biológico (liberación de dopamina y oxitocina, hormonas asociadas al enamoramiento, y la serotonina u hormona de la felicidad).Sin embargo, desde el inicio se plantea una<b> autorreflexión con la frase “muy tarde comprendí que no te debía amar”, </b>lo cual es un rasgo evidente de dolor emocional, esta persona es capaz de reflexionar sobre su propia vulnerabilidad.La canción sugiere la aceptación y cierre de la situación, que se evidencia al decir: “Vete, no te quiero ver jamás”. Entra en<b> la última etapa del proceso del duelo, la comprensión</b> de lo que ha sucedido.En las relaciones de amor intenso pueden surgir complejos estados emocionales, y en la medida en que la persona procese el dolor de la ruptura (lo que motiva esas duras palabras finales) irá en el camino de la superación personal.Finalmente, <b>¿se puede ser feliz con muy poco amor?</b> Es una excelente frase para la canción, sin embargo, podemos contestarla con esta idea: <b>el amor que recibimos es el amor que brindamos. </b>Siempre se ha planteado la interrogante de si podemos ser felices recibiendo poco amor; claro que factores sociales o factores de enamoramiento con otra persona influyen mucho, pero en una respuesta más puntual<b>, el amor que uno tiene por uno mismo es la felicidad que uno se puede proporcionar.</b>