Tomar café es un hábito que muchas personas han incorporado en sus vidas y aunque muchos jamás hayan sentido efectos negativos debido a su consumo, en otros sí podría dejar consecuencias.

Según científicos de la Universidad de Bath, en Inglaterra, el café podría afectarnos dependiendo del momento en que lo tomemos. Los expertos advierten sobre el peligro de consumir café poco después de despertar, señala una publicación del sitio web Slash Gear.

La razón de esto es que, beberlo justo después de despertar, puede generar un impacto sobre el azúcar en la sangre.

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"Comenzar un día después de una mala noche de sueño con un café fuerte tuvo un efecto negativo en el metabolismo de la glucosa en alrededor del 50% (de los participantes en el experimento). Como tal, las personas deben intentar equilibrar los posibles beneficios estimulantes del café con cafeína en la mañana con el potencial de niveles más altos de glucosa en sangre y puede ser mejor consumir café después del desayuno que antes", explica Harry Smith, investigador principal del estudio.

En el experimento participaron 29 personas a quienes se les asignó la tarea de consumir café antes del desayuno después de una noche de sueño interrumpido. Mientras que a otro grupo, bajo el mismo escenario, les dieron café después de haber comido en la mañana. Los hallazgos indican que puede ser mejor desayunar primero y luego tomar café.

Mantener niveles adecuados de azúcar en la sangre es de vital importancia para la salud a largo plazo. (I)