En estos tiempos en que tenemos que enfrentar a un mortal enemigo invisible, nuestros mejores aliados, además de la distancia social y profilaxis física, son nuestro sistema inmunológico y nuestro estado mental. Si hemos permanecido puertas adentro por tantos días, y tal vez este confinamiento se prolongue algo más, tendremos que diseñar recursos para mantenernos en control y sentir que, pese a las restricciones actuales, seguimos al timón de nuestras vidas.