El filósofo Michael J. Sandel empieza su clase con las siguientes preguntas: ¿Deberían los servicios de salud, educación y el servicio militar ser parte del mercado y venderse a los usuarios? ¿Se le debería permitir a la gente pagar por sexo, votos o una ciudadanía? ¿Está bien que se le permita a las personas vender un riñón?