¿Cuánta de la información que consume a diario le ofrece una verdadera explicación de los sucesos? ¿Logra usted entender a fondo los hechos que afectan a su ciudad o comunidad desde lo que escucha en los medios de comunicación?

Las interpretaciones y descripciones científicas permanecen todavía ausentes en los contenidos masivos que informan a los ciudadanos en su cotidianidad, afirmó Ernesto Márquez, vicepresidente de la Sociedad Mexicana para la Divulgación de la Ciencia y la Técnica, durante la charla magistral que ofreció semanas atrás como invitado de la Universidad Católica de Santiago de Guayaquil (UCSG).

Esa falta de ‘ciencia y tecnología’, dijo, afecta directamente la capacidad de la sociedad de profundizar sus problemas comunes y tomar decisiones informadas y oportunas a favor de un mejor futuro. Por ello, considera vital esforzarse, desde el rol que cada quien ocupe en la sociedad, por borrar la imagen de que la ciencia es “aburrida o solo para personas inteligentes”.

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“En las encuestas de percepción social de la ciencia no hay duda, a la gente le gusta la ciencia y tecnología, pero nuestra gente es muy noble y dice que le gusta todo, pero cuando indagamos más de cerca, nos damos cuenta de que no lo comprenden del todo. Por eso, la divulgación de la ciencia debe ser ese gancho interesante que permita que el conocimiento se perciba de una manera distinta. El conocimiento es el principal recurso estratégico en la actualidad”.

Márquez afirmó que se necesitan comunicadores que no solo relaten los hechos u opinen sobre ellos, sino que sean capaces de profundizarlos para su público. “Que esta explicación otorgue un poco más de sentido a las cosas que se dan a conocer”, sugirió, sin que se pierda el estilo o narrativa propia de cada periodista.

Esta responsabilidad también recae sobre los centros educativos superiores a los que animó a trabajar directamente con las diversas comunidades en innovación y desarrollo de una conciencia colectiva científica. “Necesitamos resultados en la sociedad. Puede haber muchos programas, pero no debemos quedarnos en la formulación de los planes de trabajo, sino que los resultados se verán a través de la cultura científica que es tan importante como la cívica o la cultura artística”.

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Cambiar la agenda de temas y de miradas que le damos a nuestro propio territorio es el primer paso en la construcción de ese ideal. “¿Guayaquil es el futuro de qué?, ¿quién se ha preguntado eso?, ¿cómo queremos actuar? ¿hacia dónde quieren ir?”, cuestionó. La ciencia no es extraordinaria, siempre está en lo cotidiano si nos fijamos bien. (I)

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Necesitamos resultados en la sociedad.  No debemos quedarnos en la formulación de planes de trabajo, sino que los resultados se verán  a través de la cultura científica que es tan importante como la cívica o la cultura artística.Ernesto Márquez