La mayoría de jóvenes de su edad mayormente dedica sus horas a chatear en sus celulares. Pero este muchacho de melena despeinada lleva cinco años empleando su tiempo en desarrollar el mayor proyecto de ingeniería de limpieza del océano. Su primera meta es eliminar la mayor isla de basura plástica del mundo, cuyo tamaño es tres veces el territorio de Francia. Para ello, después de un lustro de experimentación, el 8 de septiembre Boyan Slat zarpó desde San Francisco (California) rumbo al Great Pacific Garbage Patch (gran parche de basura del Pacífico), de unos 15.000 km2, con la meta de retirar la mitad de esos desechos del agua en cinco años. “Si tuviera que limpiarlo solo con botes y redes tomaría 79.000 años”, explica sobre esa acumulación conformada, el 46%, por redes de pesca abandonadas.