La ansiada final de la Copa Libertadores reúne este sábado en Guayaquil a miles de hinchas brasileños y ecuatorianos, que se alistan para celebrar el último partido de fútbol del torneo de clubes más importante de Sudamérica, en el que se enfrentan el Athletico Paranaense y Flamengo de Brasil. Varias instituciones y locales brasileños, ante la perspectiva de recibir a compatriotas, han preparado fiestas para festejar el evento deportivo.
Es el caso de Conecta Con Brasil, una institución cultural y escuela de portugués que desde el 2015 impulsa el aprendizaje del idioma y la cultura brasileña en Ecuador. Con la gestión de su director, Ricardo Santa Roza, el restaurante El Churrasquim del Negro y la agencia Outsider, se planificó una serie de actividades para los hinchas brasileños que visitarán la Perla del Pacífico este viernes 28 y sábado 29 de octubre.
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El principal evento del viernes es la fiesta del pré-jogo, un partido amistoso que se juega tradicionalmente el día antes de la final. Según Santa Roza, el director oriundo de Río de Janeiro, se estima recibir a 800 invitados en la fiesta exclusiva junto a los hinchas de la barra del equipo de Flamengo, que se festejará en el local de El Churrasquim del Negro.
El local, ubicado en la Avenida Las Aguas, abrirá sus puertas a los asistentes a las 17:00 del viernes 28 y durará hasta las 2:00 am del sábado 29. Ese día se realizará una fiesta privada para fanáticos brasileños desde las 9:00 hasta las 13:00, hora en la que parten para ir al estadio Monumental Banco Pichincha de Guayaquil. A partir de las 14:00, el restaurante abrirá nuevamente al público general que puede acudir a la transmisión del partido y disfrutar de la comida y la fiesta posterior por el valor de $5 de entrada. Para el día sábado hay 1200 entradas reservadas.
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En las fiestas estará presente la barra de Flamengo, el equipo que, de acuerdo a Santa Roza, cuenta con más de 45 millones de hinchas alrededor del mundo. Siete aviones charter con aficionados del equipo tienen previsto arribar desde Brasil, además de influencers, youtubers y otras sorpresas que se preparan para los invitados.
La pasión por el fútbol
Fomentar la unión de culturas es uno de los principales objetivos de Conecta Con Brasil, cuenta su director. Las culturas ecuatoriana y brasileña, según Ricardo Santa Roza, se parecen en mucho, sobre todo en la “alegría y carisma, ese lado cálido de recibir el extranjero con mucho cariño”. El docente de portugués llegó a Guayaquil para estudiar Marketing Publicitario cuando tenía 19 años y desde entonces vive enamorado de la ciudad: “Cuando vine para acá fui súper bien recibido”, recuerda.
Aunque Santa Roza menciona algunas diferencias culturales entre ambos países, algo que los ecuatorianos y brasileños comparten es la pasión por el fútbol. “A cualquier hincha que le guste el fútbol vive una emoción muy intensa, es un momento de euforia, un momento de pasión”, menciona el director de la institución. “Ustedes saben que nuestra cultura futbolera es bien intensa, Brasil es un país futbolero, es una de las referencias mundiales”, señala.
Según el brasileño, Ecuador ha superado las expectativas que la prensa de Brasil tenía del evento deportivo: “La prensa tenía una imagen de Guayaquil de años anteriores, antiguo, donde los buses no tenían puertas y los taxistas eran taxis viejos”. Sin embargo, “ya estamos cambiando agresivamente porque ya se conoce un poco más, de lo que es hoy Guayaquil”, indica Santa Roza.
El docente comenta que una de las preocupaciones de los turistas que llegan a Guayaquil es la inseguridad. “Ahí es cuando yo digo ¿cuál es la ciudad de América Latina que no es peligrosa hoy? ¿Cuál es la ciudad que ofrece absoluta seguridad al extranjero? Ninguna”.
“Yo recomiendo siempre a los turistas que vienen a Guayaquil que conozcan lo bello que hay aquí: el Malecón, el Cerro Santa Ana, puntos turísticos que a mí me gustan. Yo soy playero, si es posible ir a Salinas, a Montañita, a Olón, conocer la costa ecuatoriana que es bellísima. Comer mucho y probar de todo, especialmente la comida típica”, aconseja Santa Roza a sus compatriotas brasileños. (I)