Los portales de los comercios situados en los alrededores del mercado Central, entre las calles Lorenzo de Garaicoa, Clemente Ballén y zonas aledañas, ya lucen decorados y repletos de productos para la temporada navideña.

Manualidades, artículos para pesebres, adornos, ropa festiva y árboles ocupan los estantes, mientras los comerciantes observan con atención el comportamiento del público.

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Varios comerciantes señalan que el flujo de compradores aún es moderado y que esperan un verdadero despegue a inicios de diciembre.

Los comerciantes mantienen expectativas altas para ese mes, cuando esperan que la Navidad impulse finalmente el movimiento que tanto necesitan para cerrar el año con mejores cifras.

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Nayeli Campuzano, propietaria de un local de artículos para fiestas y manualidades, afirma que el fin de semana pasado marcó un cambio significativo en la afluencia.

Ha estado muy bien, llega bastante gente. Este fin de semana ya comenzó a crecer el movimiento, por las fiestas. Lo que más se llevan son cosas de fómix, artículos de Navidad y muñecos. También tenemos ofertas por Black Friday y eso hace que la gente se anime más”, explica.

Unos metros más adelante, Carmen Saigua ofrece todo lo necesario para armar pesebres. Indica que la demanda empezó a moverse gracias al pago de los décimos.

“Han comenzado a comprar, gracias a Dios. La gente lleva de todo un poquito para armar el pesebre. Tenemos precios económicos: pesebres desde $ 8, figuras desde $ 1. Uno debe vender accesible; si lo pone caro, no lo compran”, comenta mientras atiende a varios curiosos que revisan figuras y casitas artesanales.

Para Erika Bonilla, quien vende camisetas, bufandas, gorros y trajes de Papá Noel, la tendencia también es positiva, aunque todavía moderada.

“Lo que más ha crecido son las camisetas navideñas y los trajes de Papá Noel y Mamá Noel. El fin de semana vino más gente por los décimos, pero el movimiento sigue suave. Esperamos que para fin de mes aumente”, señala.

“La gente está guardando la platita”: compradores recorren locales, pero aún no concretan compras navideñas. Foto: FERNANDA COBOS LOPEZ

“Las personas solo llegan a cotizar lo que quieren”

En una distribuidora de artículos de papelería y decoraciones, Elena detalla que los árboles navideños ya empiezan a cotizarse, aunque aún no se refleja un alto volumen de ventas.

“Hay personas que entran a preguntar para regresar más adelante. El árbol más económico costaba $ 18, pero ya se agotó. Ahora tenemos modelos de $ 31,50 en adelante. Está flojo, pero muchos vienen a ver precios y dicen que volverán”, explica.

La ropa también juega un papel importante en esta temporada. Gabriela Rodríguez comenta que noviembre ha sido un mes de movimiento regular.

“La gente quiere invertir primero en la cena y en la comida. En diciembre ya comienzan a preocuparse más por cómo se van a vestir. Primero cotizan y luego regresan. Nosotros vendemos al por mayor y también al por menor”, señala.

No todos los negocios han experimentado un impulso inmediato. Jennifer, dedicada a artículos de bazar y manualidades, sostiene que las ventas se mantienen bajas.

“Los precios han subido y no hemos visto mayor movimiento con el pago de los décimos. Estamos bajos desde hace cuatro o cinco meses. Esperamos que en diciembre aumente, con la bendición de Dios”, dice.

En la comercializadora de nacimientos y adornos de temporada, Julia Ávila destaca que los pesebres son los productos más solicitados.

“Tenemos nacimientos desde $ 38 hasta $ 100. También vendemos árboles desde $ 137. Con los décimos hubo un poquito más de movimiento, aunque no mucho”, explica.

En el área de calzado y ropa económica, Patricio Barros señala que el flujo aún es bajo.

“La gente está guardando la platita. Buscan zapatos y ropa, pero el fuerte es desde el 15 de diciembre. Yo trabajo con productos más económicos, porque es lo que más se vende”, afirma.

Ángela, vendedora de prendas y zapatos, coincide en que tratan de tener precios bajos por la situación económica.

Mientras algunos compradores recorrían los pasillos, muchos decían que estaban “solo cotizando” y que, por ahora, los precios les parecían accesibles. (I)