Que la bioserie Chespirito: Sin querer queriendo (HBO Max) haya revivido el escándalo por el triángulo amoroso que protagonizó Roberto Gómez Bolaños con su compañera de elenco Florinda Meza, cuando aún estaba casado con Graciela Fernández, no perturba a la primera.

Así lo deja ver la actriz, que eventualmente se convirtió en esposa del icónico comediante mexicano, cuando no le incomoda responder a los seguidores del dramatizado sobre el romance y otras polémicas de ese tiempo. Las redes sociales han convocado a un nuevo público curioso que demanda explicaciones inmediatas, 50 años después del amorío, especialmente cada jueves cuando se libera un nuevo episodio de la serie producida por los hijos de Gómez, Roberto Jr. y Paulina.

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Florinda tiene una respuesta para cada uno de ellos, dado que el artista ni la madre de sus hijos pueden responder ahora. Ambos fallecieron, el primero en 2014 y ella, un año después.

Una de las preguntas que más llama la atención es la que se refiere a sus antiguas declaraciones, cuando llamó “defectos” a la familia de Chespirito en una entrevista del año 2004, que justamente resurgió en el último mes.

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“¿Fue una respuesta impulsiva y equivocada de tu parte o fue adrede?“, le indaga el usuario @jdicuru. Ella contesta: “Seguramente me preguntaron por el tiempo en que no le hice caso a Roberto. Yo lo veía como un hombre perfecto y esos serían sus únicos ‘defectos’ para decirle que sí, a pesar de su insistencia”.

Para Florinda, su declaración se ha sacado de contexto, porque reconoce que no hubiera podido entablar relación con Roberto si no hubiera respetado a sus hijos. “Fue un modo de hablar, respondiendo a una pregunta específica”.

Y así con todos los cuestionamientos posibles del público (siempre que no sean repetitivos). Por ejemplo, cuando le preguntan sobre las disputas tras cámaras entre ella y los otros actores del Chavo del Ocho. “¿Lo que dice la serie no es verdad?”, pregunta @denisse_kaulitz_1.

Para Florinda el título presenta verdades a medias. Especialmente se refirió al viaje a Acapulco, donde grabaron episodios especiales de el Chavo y El Chapulín Colorado, y donde se considera que empezó la debacle del equipo. “Jamás pasó absolutamente nada de lo que ahí ponen como conflictos”.

Por supuesto, están las críticas a su rol en el triángulo amoroso entre Chespirito y su esposo, y la comparan con la cantante Ángela Aguilar, que fue parte de una situación similar con los también cantantes Christian Nodal y Cazzu. “¿Señora, usted es pariente de Angela Aguilar?“, le interrogan en más de una ocasión.

Florinda no se despeina con eso: “¿Y usted es pariente de Los Chifladitos?“, bromea la artista de 75 años en alusión al famoso sketch de Chespirito sobre dos personajes nada cuerdos. Cada jueves, con un nuevo capítulo de Chespirito: Sin querer queriendo los comentarios se le multiplican a la actriz. Muchos corren a ver qué hay de provocativo. Y ella también. (E)