Quito vive una mañana de emoción y homenaje. Faltan pocos minutos para el inicio de la misa de despedida de Paulina Tamayo, La Grande del Ecuador, en la Basílica del Voto Nacional.
Desde las 11:30, el féretro de la artista fue trasladado desde el Teatro Nacional de la Casa de la Cultura, donde durante toda la noche cientos de personas hicieron fila para despedirla entre cantos y oraciones.
A esta hora, los alrededores del templo permanecen llenos de seguidores que entonan Morena la ingratitud y Parece mentira, canciones que marcaron su carrera. Con flores y pañuelos, el público acompaña el ingreso de la carroza fúnebre, en medio de aplausos y lágrimas.
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La ceremonia religiosa está prevista para el mediodía, cumpliendo el deseo expresado por la propia cantante, informó su mánager, Karina Córdova.
En el interior del templo se encuentran familiares, amigos y colegas del ámbito artístico, mientras en redes sociales se multiplican los mensajes de cariño y agradecimiento.
Paulina Tamayo falleció el martes 21 de octubre a los 60 años, por una insuficiencia respiratoria. Su despedida, que comenzó en la Casa de la Cultura y continúa en el corazón del centro histórico, se ha convertido en una jornada de memoria popular. (I)
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