La campeona del tenis Serena Williams acaba de sincerarse sobre las dificultades que está teniendo para volver a su peso antes de haber quedado embarazada de sus hijas Olympia y Adira.

En ese sentido, la leyenda deportiva confesó que está usando los famosos medicamentos para bajar de peso, ante su frustración por no ver los resultados esperados tras hacer dieta y ejercicios.

“Como atleta y como alguien que lo ha hecho todo, simplemente no lograba alcanzar mi peso ideal, y créeme, no tomo atajos. Hago de todo, menos atajos”, ilustró la deportista en una entrevista en TODAY.

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Cuando nació su primera hija, Olympia, en el 2017, Serena empezó a correr y caminar por horas para reducir sus medidas. “Literalmente practicaba un deporte profesional, y nunca podía volver a donde necesitaba estar para mi salud, para mi peso saludable, hiciera lo que hiciera”, agregó.

Serena explicó que al tomar la decisión de usar la medicación GLP-1, que suprime el apetito imitando una hormona del intestino, también consideró otros factores, además del sobrepeso: que en su familia la diabetes es hereditaria y la presión que empezado a sentir en sus rodillas. La tenista aclaró que ha sido constante en tomar la medicación desde abril y, hasta el momento, ha perdido 31 libras.

Recientemente Serena se unió a una campaña de la empresa Ro (de la cual su esposo Alexis Ohanian es inversor), que justamente prescribe GLP-1, para normalizar el uso de este tipo de medicamentos y combatir la idea de que tomarlos es la “salida fácil”.

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Así, Serena Williams se suma a la lista de celebridades que consumen esta droga, cuyo nombres comerciales son Ozempic y Mounjaro. La presentadora Oprah Winfrey, la actriz Whoopi Goldberg, la cantante Meghan Trainor, entre otros, han sido abiertas en admitir su consumo. (E)