La Semana Santa o Semana Mayor, la conmemoración de la pasión de Cristo, su entrada a Jerusalén, la última cena, el viacrucis, la muerte y su resurrección es un periodo de reflexión, recogimiento, penitencia y agradecimiento para los creyentes. Si bien gran parte de la comunidad confunde su verdadero significado con viajes y paseos vinculados al feriado que coincide con estas fechas, los fieles mantienen sus tradiciones religiosas pese a la crisis sanitaria mundial por el COVID-19.

El actor Danilo Carrera y los periodistas y presentadores Teresa Arboleda, Mariela Viteri y Eduardo Andrade comparten con este Diario sus creencias individuales y sus tradiciones familiares para expresar su fe.

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“Le pido a Dios siempre por los demás, no por mí”

Nació y ha crecido en el seno de una familia católica. El actor y deportista ecuatoriano Danilo Carrera Huerta sostiene que su relación con Dios guarda un vínculo muy especial, que le inculcó su madre, desde temprana edad.

“Yo voy a misa a diario, voy a la iglesia a diario, incluso cuando he estado en México y cuando estoy en Ecuador vamos a la iglesia de Los Ceibos en familia”, cuenta el artista.

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Carrera asevera que a diferencia de otros feligreses, cuando sus planes profesionales y personales están bien es cuando más se acerca a Dios, para agradecer por las bendiciones. Mientras tanto, cuando los planes se cambian o se trastocan prefiere solucionarlos por su cuenta antes que pedir su ayuda. “Le pido a Dios siempre por los demás, que no les falte nada, que los proteja, no por mí, yo agradezco. Siento que tal vez yo me alejo de él, pero él no se aleja de mí. Él siempre me está bendiciendo”, recalca Carrera, devoto además de la Virgen de Guadalupe.

“Mi fe, creo yo, es lo más valioso que tengo espiritualmente”

La presentadora de televisión y directora de medios Mariela Viteri afirma que creció dentro de la religión católica y se convirtió en cristiana a los 34 años. ”En verdad siempre busqué mucho de Dios y un día llegó un líder de mi grupo a enseñarme la teoterapia, la cual me enamoró”, dice sobre su conversión.

“Mis papás no eran tan practicantes del catolicismo, por eso en realidad la vivíamos más como un feriado eso sí, con fanesca, no se comía carne los viernes, se rezaba el viernes a las 15:00 y se escondían los huevitos de pascua el Domingo de Resurrección y además no nos bañábamos en el mar el Viernes Santo porque nos podíamos convertir en pescado (ríe), como ves una mezcla de religión, cultura americana y creencias populares”, detalla la también locutora radial.

Dice Viteri: “La fe es lo más valioso que tengo espiritualmente hablando y la misma se pone a prueba muy seguido cuando quito la mirada de Dios, pero él me recupera rápido”.

Revela además que sí ha sentido que se ha alejado en ocasiones de Dios. “Creo que cuando me iba a casar la primera vez, me sentí muy alejada de Dios, porque realmente estaba muy en las cosas del mundo, pero Dios supo darme mi tiempo; y luego de algunos años, ya casada nuevamente, la recuperé fervientemente”, sostiene.

“Mi único camino cierto ha sido la fe”

Para Teresa Arboleda, periodista de Ecuavisa y presentadora del noticiero estelar de la cadena, la religión ha sido parte de su familia desde muy pequeña. “Crecí yendo a misa y cumpliendo todos los ritos de la religión católica. Mi abuelita paterna era evangélica y desde que tengo memoria, ella me leía la Biblia. Cuando tuve autonomía nunca dudé de mi fe católica”, relata.

Parte de sus costumbres en esta época, indica, es recorrer las iglesias y asistir a los oficios religiosos de su parroquia, como lo hacía junto con su progenitora cuando era una niña. “Lo hago con mucha devoción y lo comparto con mi grupo de amigas de toda la vida”, dice Arboleda, quien ha recibido formación con los sacerdotes de Jesucristo Sacerdote y con el Sodalicio de Vida Cristiana.

Aunque esta tradición no ha sido fácil mantenerla con sus hijos la comparte, asegura, con grupos de jóvenes practicantes católicos.

“Me ha tocado vivir experiencias que generan dolor y angustia y mi único camino cierto ha sido la fe. Tal vez, en mi juventud, el empeño de salir adelante, construir un futuro y una carrera profesional, me alejaron un poco de la práctica y la vivencia de mi fe. Cuando la vida me sacudió duro, retomé mi camino y profundicé en el conocimiento de esta fe que significa vida en el mejor de los sentidos”, expresa la comunicadora.

“Con oración y con fe se encuentra la sanación”

Eduardo Andrade, compatriota que actualmente se desempeña como presentador de Combate Guatemala y ha estado invitado en estos días como anfitrión en Soy El Mejor de TC Televisión, es un católico practicante desde su infancia, religión que comparte toda su familia.

“Yo soy católico, toda la vida, soy creyente, antes frecuentaba mucho más, era de ir en familia a misa siempre los domingos, igual en oportunidades especiales o cuando uno tiene ese momentito especial también se lo dedica, porque uno tiene que ir no solamente cuando hay misa sino cuando verdaderamente sientes que tienes que conversar con Dios”, expresa.

Como parte de las creencias y costumbres que mantienen en su familia, Andrade indica que durante la Cuaresma no consumen carnes rojas y asisten juntos a las celebraciones litúrgicas de su iglesia.

“Creo que al final es pasarlo como siempre aprovechando unos días que te dan libres, pero en familia, eso es también lo más bonito que tiene el compartir, ir a misa en familia, aprovechando que estamos juntos. Sin duda, para mí, creo que el Domingo de Ramos es muy importante, cuando no he podido ir o, por ejemplo, cuando el año pasado, que estuvimos en cuarentena, mi hermana hizo los ramos con una palmerita de su casa, se lo dio a mi mamá, me lo dio a mí, y siempre hemos tratado de mantener, y eso es lo más bonito que preservamos, es guardarlo en la casa a lo largo del año como un recuerdo y se vuelve especial”, menciona.

Sostiene que como le ocurre a muchos creyentes, la fe se ha puesto a prueba en momentos difíciles, sin embargo recalca que es la misma fe la que lo ha ayudado a salir adelante en las adversidades. “Cuando falleció mi papá, uno siempre busca el porqué, pero luego comprendes que el tiempo de Dios es perfecto, la vida al final lleva un rumbo, y que con oración y con la fe se va a poder encontrar esa sanación”, señala.

Andrade, quien ha sido catequista en la iglesia a la que asiste, admite también que sí hubo un momento en el que cuestionó la postura de otros ante él.

“Unos padres de familia se quejaron y dijeron que cómo era posible que el profesor, yo, sea un chico que tenía un programa de televisión donde chicas iban casi que con poca ropa, siento que ahí me golpeó, creo que ahí nos damos cuenta de cómo las personas te juzgan sin conocer la verdadera motivación de las personas, que para mí siempre ha sido la docencia, enseñar de manera práctica a los chicos para que no se alejen de la religión”, cuenta. (I)