La guayaquileña Frida Contreras es un rostro fresco, divertido y que se hace conocer en internet. Comenzó su recorrido frente a las cámaras a los 8 años, cuando participó en un concurso infantil en televisión nacional. Desde entonces, su interés por el arte escénico, el canto y los medios visuales fue tomando forma a través de clases, castings y producciones publicitarias.

A los 14 años encontró en las redes sociales una posibilidad para su camino profesional. “La verdad, creo que fue algo de accidente”, dice sobre sus inicios como creadora de contenido. “Hice una ‘promo’ de un reality y eso me dio muchísima exposición. Tenía un público que parecía que teníamos una asignatura pendiente. Y yo sentí algo muy natural, la forma de comunicar a través de redes, porque desde muy pequeña veía los videos de Yuya, de Juanpa Zurita… Hacía videos para YouTube desde chiquita”.

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Ese reality fue Calle 7, un programa de competencia que la conectó con una audiencia más amplia. Pero su preparación artística había empezado mucho antes. Su padre, publicista y aficionado al teatro, fue una de las primeras influencias.

Luego vinieron los talleres formales, las clases de canto y los instrumentos musicales. “Me gustaba recrear escenas de Zoey 101, Isa TKM, Violetta… Siempre relacionaba esas novelas con lo que quería hacer. Después del reality ya no quise parar y me metí a clases en el Teatro Sánchez Aguilar. Era algo mucho más serio, con estructura semanal. También seguía con las clases de canto. Me encantaba estar activa todo el tiempo”.

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Frida no dejó completamente el modelaje, aunque su participación fue intermitente, formó parte de campañas para marcas como Deprati y Súper Éxito. “Moría por estar en Deprati. Siempre que hacía casting me decían: ‘Es que no te ves como niña ni como adolescente, estás en medio’. Hasta que un día me llamaron para una editorial. De ahí me llamaban para la revista, para la página web…”.

Actualmente tiene 22 años y mantiene presencia activa en redes sociales, con 251,3 k seguidores en TikTok, 86,5 k en Instagram y una cuenta alterna con contenido más personal bajo el nombre @solofidudais. “Hago videos sobre mis últimas compras, lugares turísticos cuando viajo, y todo lo hablo yo directamente. Es una cuenta más personal”.

Su interés por el teatro se mantiene. Está en planes de volver al microteatro en Guayaquil, una vez que finalice su actual temporada de viajes. “Quiero empezar a ejercer más el teatro. Son tantos años de estudio que ya necesito ponerlos en práctica. Es muy distinto cuando estás frente al público, cuando se vuelve un trabajo profesional”.

Entre sus planes está el lanzamiento de un emprendimiento propio: prendas transformadas a partir de ropa de segunda mano. “Quiero hacer prendas que tú ya hayas usado, pero convertirlas en algo totalmente diferente”.

Frida también trabaja con la productora Output Shows, realizando contenido para conciertos y actividades en vivo. “Me dedico a regalar entradas sorpresa en la calle, casi siempre en Santa Ana, el malecón, lugares turísticos. Hago los retos, edito los videos y los paso a Output, que está en Quito”.

También ha protagonizado el corto de ficción Sombras, junto con Adrián Peraza y Steff Alarcón, con producción de Iwanapix y Palett Studio.

En los próximos días asistirá a los Premios Ícono en Medellín y posteriormente viajará a México. “Wow, México siempre es México”, dice con entusiasmo la joven influencer. (E)