Un talk show radial que se propone como una distracción educativa y una fuente de buenas noticias es Estudio B, de Radio City (de lunes a viernes, de 16:30 a 18:30). Sus conductores, Juan Carlos Amador, Daniella Negri y Juan Fernando Crespo, cumplen cinco meses al aire.

Amador, productor y músico, ha sido parte de uno de los programas con los que Radio City se inició, Buscando la luna, y luego condujo el espacio musical Estudio Gagá. “Quisimos unir muchas de esas buenas experiencias con algo más actual y con conductores locales de calidad. Hay un invitado cada día, pero el formato no es de entrevista, sino de debate, con gente relevante en gastronomía, artes, música, deportes, política o viajes. “Queremos gente que pueda inspirar a los demás a nuevos formatos de vida, a hacer las cosas distintas”, agrega Amador.

En esa lista, dice la actriz Negri, ha estado el cineasta Sebastián Cordero, el actor Alejandro Fajardo, el ultramaratonista Leonardo Mourglia, la diseñadora Teresa Valencia, y una larga lista de restauranteros, cantantes, deportistas y comunicadores.

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Todos los episodios están disponibles en Spotify, en formato pódcast, para quien quiera comprobar la variedad de los invitados. “El programa se maneja con humor”, dice Amador, “pero no somos irreverentes”, puntualiza Crespo. Su intención tampoco es ser un noticiario ni informativo ni competir con los medios digitales. “Queremos darles la oportunidad de escuchar algo bueno. Somos una distracción educativa, porque los tendremos distraídos con buenas noticias, tecnología, gastronomía, música, cine y entretenimiento en general”.

En cuanto al estilo musical de Estudio B, la palabra es ecléctico, porque los tres conductores tienen gustos distintos. Amador, productor musical, quería fusionar la conversación con el trabajo bien aceptado que realizó en Estudio Gagá. “No somos iguales, no somos contemporáneos en edad, somos gente con gustos distintos, creamos mesas de discusión constructiva, para que cada uno tenga su propuesta”.

En esas dos horas, los locutores y los entrevistados navegan segmentos rotativos, como un microinformativo nacional e internacional, tanto de entretenimiento como de noticias más serias, una actualización del estado del tránsito, un top de música y otro de películas.

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Foto: Ronald Cedeño

Crespo señala que cada uno tiene sus fortalezas. Él se hace cargo del entretenimiento, la actualidad y deportes; Negri maneja los insertos informativos de música, vialidad y noticias; Amador da una perspectiva más profesional de la música. Y todos opinan. “Nadie maneja una única voz, es una mesa de discusión. Hay entrevistados que son un nombre y una primicia, y otros que no son conocidos, pero aportan conocimiento importante al programa”.

¿A quiénes le han puesto el ojo para tenerlos en el set? “Tom Cruise”, contesta sin dudar Amador. “Lo importante de las entrevistas es combinarlas con temas del país, como por ejemplo la Amazonía. Queremos a todos nuestros campeones en cabina, a Chito Vera, a Richard Carapaz, pero así también a todo el que esté haciendo las cosas bien en el mundo, y si es ecuatoriano mejor”.

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¿Es importante la fama para poder llegar a una plataforma como Estudio B? Así solía ser en programas en los que trabajó anteriormente, admite Juan Carlos Amador. “La fama era importante para catalogar qué tan valioso era el entrevistado; hoy yo creo que la cosa ha cambiado, porque a veces entrevisté mucho patán famoso, que no me aportaba absolutamente nada”, confiesa. “Sí, me pasó”, agrega, y menciona a un reconocido actor extranjero. “Te da un nombre, pero no te da contenido. Hay gente que logra hacer las cosas mejor sin necesidad de tener fama”.

Estudio B sigue mutando y experimentando. Desde la próxima semana llegará el segmento de encuentros, en el que especialistas en diferentes áreas se sentarán a discutir un tema específico. “Va a ser una mesa redonda, pero ese tema no tendrá nada que ver con su especialidad”, detalla Negri. “La intención es que sean tópicos abiertos; eso les gusta mucho a los entrevistados, pues ellos se abren como personas”.

“La idea de esto es hacer magia, y que las personas (oyentes) puedan viajar y tener algo muy cosmopolita, muy abierto de mente en un mundo que dice ser tolerante, pero es cada vez más cerrado, no hay comediante que diga algo sin ser criticado”. En Estudio B, agrega Amador, el tono puede percibirse como formal (“no usamos malas palabras ni vulgaridades”), pero quieren poder tocar todo tipo de temáticas. Y que haya lugar para el desacuerdo, el sentido del humor y el entretenimiento. Y por eso una de sus preocupaciones es cuidar el ambiente y el estado de ánimo en el set. “No hay forma de mentir sobre estas cosas, se va a reflejar”.

Así acompañan a la gente en el horario pico, hasta el atardecer, personas que según notan en los mensajes en las redes sociales, están en un rango de edad de 25-50 años, que vuelven a casa después del trabajo y que tienen que hacer una desconexión obligatoria de la pantalla para poder poner los ojos en la calle. Le queda usar el oído, la imaginación. Como dice Negri: “Te da ese poder que no tienes con las redes”.

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La señal de Radio City está en 89.3 FM en Guayaquil y 99.7 FM en Santa Elena. También puede escucharse en línea en radiocity.com.ec. (E)