Historias de cuatro mujeres desaparecidas en Ecuador se recogen en el documental ‘Ausencias’

Giovanna Pérez despareció el 4 de diciembre de 2010, Juliana Campoverde desapareció el 7 de julio de 2012 y fue asesinada por el pastor evangélico Jonathan Carrillo, de Michelle Montenegro no se supo más desde el 5 de junio de 2018, Natalia Subía también desapareció el 15 de septiembre de 2018 y parte de sus restos fueron hallados en una quebrada.

Sus historias, así como la lucha inclaudicable de sus familiares por encontrarlas y que se haga justicia, se recogen en el documental ‘Ausencias’, realizado por el documentalista español Luis Cintora, en colaboración con el colectivo Contrapique, el Comité de Lucha Contra la Violencia, Desapariciones y Feminicidios (Covidefem) y Luna Roja.

La producción audiovisual se proyectó en Quito, el 25 de marzo, en el museo de la Universidad Central del Ecuador, donde además se realizó una muestra fotográfica de las movilizaciones y plantones que por años han protagonizado parientes y amigos de las víctimas de diferentes casos a escala nacional.

Los familiares de las cuatro mujeres que protagonizan el documental denunciaron indolencia, lentitud e ineficiencia en el sistema judicial del país.

“Siempre manejan una investigación sesgada y prejuiciosa. Cuando se hace una denuncia, ellos te dicen que si es mujer se ha de haber ido con su novio... o que ya ha de regresar a los nueve meses con un hijo; si es varón dicen que ha de estar borracho o ha de estar fumado (drogado). Estamos luchando contra la negligencia de personas que no quieren hacer su trabajo, tenemos investigadores y fiscales de escritorio”, reclamó Fernando Montenegro, padre de Michelle.

Familiares de Michelle Montenegro piden datos de su búsqueda

Fernando Montenegro apuntó que las indagaciones no avanzan y se centran en un posible suicidio, lo cual él rechaza, ya que -asegura- la Policía no ha seguido el rastro de pistas importantes. Criticó que no se ha investigado a fondo la versión del último taxista que la vio con vida y habría manifestado que dejó a Michelle en un sector de Sangolquí. “Nosotros revisamos las cámaras de seguridad y nunca llega el taxi”, dijo Montenegro.

La madre de Giovanna Pérez, Yanera Constante, recordó que ante la negligencia con la que el sistema ha llevado el caso de su hija, en septiembre de 2018 presentaron una denuncia contra el Estado ecuatoriano ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). El organismo admitió a trámite la denuncia en mayo de 2020.

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“Aquí en el Ecuador no hay justicia. Aquí todo se tapan entre ellos. Hemos recurrido a esas instancias internacionales para que el Estado responda y se cree un precedente”, reprochó Constante y señaló que, entre otras anomalías, el primer fiscal que estuvo a cargo la investigación filtró información de las diligencias a la familia del último hombre con el que Giovanna tuvo contacto. Durante estos doce años el sujeto no se ha presentado ante la Fiscalía y se desconoce su ubicación, indicó Constante.

Elizabeth Rodríguez, madre de Juliana Campoverde, recriminó que el caso de desaparición de su hija pasó por 10 fiscales y, aunque la Justicia condenó al pastor evangélico por secuestro extorsivo con resultado de muerte, hasta ahora no se han podido hallar los restos de la víctima.

“Son 3.543 días que estoy sin mi hija. Después de una lucha incansable se logró tener una sentencia a un culpable, pero por la negligencia de los 10 fiscales que llevaron el caso los cómplices y encubridores no fueron vinculados al debido proceso. Las medidas de reparación que fueron dictadas por la Corte aún no se cumplen, sobre todo las búsquedas de mi hija. Seguimos esperando que el Estado responda”, enfatizó Rodríguez.

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Isis Subía, hermana de Natalia Subía, reclamó que muchos casos de desapariciones de mujeres la línea de investigación inicia con que se trata de una ausencia voluntaria. Denunció que el trato que reciben los familiares por parte de operadores de justicia suele estar cargado de “estereotipos y juzgamientos”.

“Natalia estaba feliz, ella no tenía por qué desaparecer. Mi hermana tenía muchos proyectos...”, dijo Isis entre lágrimas. “Pedimos al Estado que no se cierren los casos hasta que haya un culpable tras las rejas. Pero más que eso, exigimos que las mujeres deben dejar de desaparecer, también los adultos mayores y niños, porque es una problemática que se está normalizando en la sociedad y no se hace nada”, comentó Subía.

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Para el director de la cinta, Luis Cintora, el trabajo audiovisual se suma a la lucha por la verdad y justicia. Además, busca despertar el interés y la empatía de la ciudadanía en el tema de las desapariciones.

Las organizaciones promotoras del documental prevén realizar una nueva proyección de ‘Ausencias’ en Ambato, a mediados de abril. Posteriormente, difundirán el material de manera gratuita a través de redes sociales.

Según cifras del Ministerio de Gobierno, solo en enero de 2022 se registraron 598 reportes de personas desaparecidas, de los cuales 511 han sido localizadas, mientras que 87 siguen en investigación.

De las 87 personas que todavía no han sido encontradas, las mujeres abarcan el 62,1 % de casos, de acuerdo con las estadísticas oficiales. (I)