Una jueza estadounidense desestimó una demanda que busca que el Museo Metropolitano de Arte de Nueva York devuelva una obra de Pablo Picasso que un hombre de negocios judío alemán supuestamente se vio obligado a vender a bajo precio para poder escapar de la persecución de los nazis y el fascismo.

La jueza Loretta Preska dijo ayer que la bisnieta de Paul Leffmann, quien fuera dueño de The Actor, no podía demostrar bajo las leyes de Nueva York que la pintura se vendió bajo “coacción”, lo que justificaría el regreso a su familia.

La demanda es una de las muchas que buscan lograr la devolución de arte robado o vendido después de que Adolfo Hitler tomó el poder en Alemania en 1933. (I)