El pesista Iván Escudero se coronó campeón de la división 81 kg de los Juegos Panamericanos Junior y con ello se clasificó a los Juegos Panamericanos absolutos, que tendrán lugar en Santiago de Chile el año 2023. Jenifer Becerra se quedó con el bronce en los 59 kg.

A primera hora del sábado, en la división de los 59 kg, Becerra peleaba duro por subir al podio, no solo porque al frente estaban rivales complicadas, como la colombiana, la estadounidense y la venezolana, sino porque también se le venían a la mente momentos de preocupación por la lesión que sufrió cuatro años atrás en el Campeonato Panamericano Junior de Manizales.

La ecuatoriana cerraba el arranque con 83 kg levantados en su mejor peso en los tres intentos. “Mi mejor peso en envión llega a 87 kg, pero debido a la luxación del codo que sufrí hace poco, decidimos con mi entrenador no exigir al brazo... Distinto en envión, donde no se lo exige tanto en el movimiento y pude poner 105 kg”.

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La suma total del arranque y el envión llegó a 188 kg, lo que bastó para dejar sin chance a la halterista llanera que peleaba por el bronce. “Estoy muy orgullosa de lo que he hecho, trabajé muy duro y no cabe duda de que cuando el ser humano quiere conseguir algo no tiene límites”, dijo.

El cuencano Iván Escudero, quien el mes pasado con apenas 20 años participaba y se llevaba medalla de plata en arranque en un durísimo Campeonato Panamericano Absoluto de Levantamiento de Pesas de Guayaquil, donde llegaron halteristas que han participado en mundiales y en los últimos Juegos Olímpicos de Tokio, ingresaba a la plataforma del coliseo Ramón Elías López mostrando una seguridad única, tanta como el peso a levantar en el primer intento en la modalidad arranque, 143 kg, el mejor de la serie inicial entre los diez participantes en la división de los 81 kg masculino.

Y vaya que estaba seguro, tanto que terminó poniendo tres kilogramos más, 146 para superar el primer intento; pero eso no le bastó, porque en el segundo puso 150 kg y en el tercero 152, siete kilogramos más que el mexicano que al cierre del arranque solo llegó a 145. A partir de ahí, la medalla de oro se venía venir, simplemente porque de no fallar ningún intento en envión, sumaría un total inalcanzable de acuerdo con lo que iba a pedir por levantar. Arrancó el envión con 178 kg, solicitando 183 kg para el segundo y un sorprendente 190 kg para el tercero, que terminaría fulminando toda ambición de su rival mexicano que aspiraba a “pelearle” el oro, si Iván fallaba algún intento. Al final, el total marcaba un sorprendente 342 kg llenos de color dorado.

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Pero Escudero, alguien que trabaja con perfil bajo, asegura tener las claves del éxito en tres puntos claves. “Lo primero fue hacer válidos mis seis intentos, estar concentrado y cumplir a cabalidad las disposiciones de mi entrenador... Gracias a Dios, se dio todo y logramos un objetivo que nos pusimos en Guayaquil, conseguir el oro”.

Otro momento clave, cuando se lo recuerdan, sin duda fue su participación en el Campeonato Panamericano Absoluto de Guayaquil, que se cumplió a inicios de noviembre. “Sin duda fue un evento que me sirvió para motivarme, ya que pude alcanzar una medalla de plata en arranque, y poder levantar de no haber podido participar antes en el Mundial Junior, donde seguro con estas marcas hubiese conseguido medallas. Es un orgullo para mí, desde chico me decía que tenía que subir al podio y aquí estamos... Hoy solo me queda dedicar esta medalla a mi familia, al país y a mi Dios que siempre me da fuerzas”, apuntó el azuayo.

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El levantamiento de pesas tricolor volverá a tener participación en los I Juegos Panamericanos de Cali, este domingo con Kelin Jiménez en 76 kg, Neiser Grefa en 96 kg y Bella Paredes, quien irá en una división que no es la de ella, los 87 kg; la halterista es de 76 kg. (D)