Cuando un partido queda 0-0 en el tiempo reglamentario y prórroga, el equipo que termine ganando, suele sacar provecho a los detalles en la tanda de penales, como parte de una estrategia fijada.

El hecho ocurrió en la tanda de penaltis entre Australia y Perú que finalmente ganaron 5-4 los australianos, para conseguir el pase al Mundial Qatar 2022.

Segundos antes de terminar la prórroga, el técnico australiano ingresó al portero suplente Andrew Redmayne, quien se caracteriza por ser buen atajador de penales con un estilo particular.

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El arquero Andrew Redmayne recibió muestras de afecto de los aficionados de Australia. Foto: KARIM JAAFAR / AFP. Foto: karim jaaafar

Lo curioso del caso es que el propio Redmayne se expuso a que el árbitro principal lo sancionara con tarjeta amarilla, por no cumplir las normas en su defensa del arco.

Redmayne podía hacer lo que quisiera, menos dejar de pisar la raya del arco, ni adelantarse al disparo del cobrador, cuestión que cumplió.

“El árbitro también estaba un poco desconcertado por mis cosas, me amenazó con tarjeta amarilla un par de veces por intentar provocar a los jugadores y le dije que no estaba haciendo eso”, dijo Redmayne, quien explicó la clave de su éxito.

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“Trabajamos en mi movimiento previo al penalti durante tiempo, moverme y permanecer en la línea, y también crear una gran presencia en la portería”, agregó.

La intención del cancerbero era crear la desconcentración del rival, cuestión que logró en dos de seis penales que cobró Perú. Uno de ellos lo atrapó que fue el definitivo.

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“Cualquier cosa pequeña que pudiera hacer para ganar, aunque sea un uno por ciento lo haría, destacó el arquero según la agencia EFE.

Con su pequeño detalle, Australia estará por sexta ocasión en un Mundial de Fútbol.

(D)

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