“El fútbol es la única forma de amor eterno que realmente existe”, concluía, finalmente convencido, Luciano De Crescenzo, napolitano, prolífico escritor de prestigio, ingeniero, director de cine, actor. “Nunca un milanista se tornará interista, al igual que un aficionado de la Lazio no se hará de la Roma”, sostenía. “En mi caso, soy hincha del Napoli y lo seguiré alentando siempre, incluso ahora que está en la serie C”, agregaba.