Fueron seis semanas lo que duró la presencia de Luis Espinel en el banquillo técnico de Olmedo. El DT se va sin triunfos y “frenteando” una serie de problemas entre futbolísticos, logísticos y económicos.

“Hemos decidido dar un paso al costado, renunciar, ya que desde que llegamos hice una propuesta de jugadores que nunca se concretó pese a ofrecimientos; tampoco pudimos sumar jugadores de reserva”, lamentó Espinel, que se va con un empate en seis juegos.

La última derrota fue el domingo, con un 5-0 en visita a Deportivo Cuenca. Del juego, Espinel rescató la “valentía” de un equipo que se “desmorona”, que “pelea sin armamento”, con apenas una plantilla de catorce jugadores, algo que desencadenó su decisión a día seguido.

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En diálogo con Zona Deportiva de Riobamba, el estratega remarcó lo expuesto el domingo en Cuenca. “Nos encontramos con las manos atadas”, dijo el timonel, que habló de la reducida plantilla con la que trabajó; “además, problemas económicos, logísticos y de trato a la plantilla”, señaló el profesional, en referencia a la movilización que hizo el plantel, por sus propios medios, para llegar a la capital azuaya.

“Todo eso no permite tener las condiciones mínimas para seguir luchando. Venimos a tratar de conseguir el objetivo (salvar el descenso), pero definitivamente no se puede así. No hay apoyo de la dirigencia ni condiciones mínimas para trabajar, por eso decidimos renunciar y dar un paso al costado”, dijo Espinel.

Con la salida del técnico, el encargo queda para Nelson Brito, quien tiene previsto llegar este martes a Riobamba para asumir el mando técnico del Ciclón andino. (D)