Un estudio británico divulgado el pasado martes desmiente la creencia popular de que el consumo de huevos provoque un aumento excesivo del colesterol e incida en el riesgo de infarto. El trabajo de dos expertos de la universidad de Surrey (sureste inglés) confirma lo que investigaciones anteriores habían establecido, que lo verdaderamente peligroso para el colesterol es la grasa saturada.