Mirko Rodic, propietario de Todo Arte, es enfático en dos cosas cuando se refiere al décimo quinto aniversario de creación de  su galería: que la logró con mucho esfuerzo, pues sus recursos siempre fueron limitados; y que su amor por la cultura, principalmente, le ha permitido sostener el negocio de las exposiciones artísticas, que no siempre es del todo rentable en el país.