“Siempre se me ha asociado con el mundo del crimen por mis películas. Lo sé y no me gusta, pero al mismo tiempo sí hay una atracción. Es como una droga detestable que me persigue”. El reciente estreno de Los infiltrados (The Departed) motivó estas palabras de Martin Scorsese, uno de esos grandes realizadores norteamericanos que todavía, y a las bravas, pueden firmar a cabalidad sus obras cinematográficas. Aquí el hombre parece volver a sus obsesiones originales, especialmente a las de aquellas violentas exposiciones de Mean Streets (1973), Taxi Driver (1976) y Goodfellas (1990).  
                    
Con tanta sangre derramada es difícil dar al filme una bienvenida del todo efusiva, pero es indudable que la maestría del director en el manejo de la acción y la meticulosa textura en sus escenarios revelan a un artesano prodigioso de las imágenes.

Departed significa ‘difuntos’, que es el inmediato resultado de los difusos roles de los protagonistas centrales. Billy (Leonardo DiCaprio) es un rebelde con muchas causas que termina trabajando como infiltrado en la mafia irlandesa de Boston. Collin (Matt Damon) es su contrapartida, un detective de la policía estatal que a su vez es el contacto secreto de Costello (Jack Nicholson), uno de esos engendros del mal que Scorsese introduce con especial deleite. Entre Billy y Collin solo hay un breve encuentro inicial, hasta que su oficio los lleva a un enfrentamiento que podría haber sido un cliché en manos de otro realizador.

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Entre ellos entra Madolyn (Vera Farmiga), una terapeuta que se involucra con ambos. En roles secundarios aparecen Martin Sheen, Alec Baldwin y Mark Wahlberg, como policías que se entrecruzan en rutas letales de un siniestro juego de felinos y ratas. Los infiltrados tiene mucho que ver con aspectos duales de la personalidad de estos seres.

Es difícil percatarnos de lo que se esconde dentro de cada uno, porque Scorsese y su guionista William Monahan, al adaptar la historia de la película china Asuntos internos, recrean una visión mafiosa de la existencia con una extraña y siniestra sensibilidad.

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Los actores son excelentes. Esta es la mejor actuación de DiCaprio y su tercer trabajo consecutivo para Scorsese. Cada una de las apariciones de Jack Nicholson literalmente inflaman la pantalla con un humor negrísimo. Pero en el fondo de estos difuntos y de los que están a punto de serlo hay una humanidad que nunca puede salir a flote.

Contada en un ritmo frenético y editada en el precipitado estilo de algunas de las nuevas series de televisión, es imposible desconectarse de lo que parece ser el objetivo central del filme: la bancarrota moral de una generación. “Todo sale de la rabia de ver cómo están las cosas.

Es algo que quiero frenar porque no quiero ser un simple nihilista”, dice el director.

LOS INFILTRADOS
Dirección: Martin Scorsese.
País: Estados Unidos, 2006.
Elenco:  Mark Wahlberg, Matt Damon, Jack Nicholson, Leonardo DiCaprio.
Duración: 149 minutos.
Género: Acción.
Cines: Cinemark y Supercines.