La Ley para la Rehabilitación de la Producción propuesta por el diputado socialcristiano León Febres-Cordero, no consigue mayoría al interior del Congreso Nacional, ni el beneplácito del sector bancario. Promoverá el aparato productivo, es el discurso de los coidearios del ex Presidente, mientras que los socialistas sostienen que este proyecto perjudicará a la banca serrana.

En declaraciones para Citynoticias (89.3 FM en Guayaquil), el legislador socialista Segundo Serrano aseguró hoy que la iniciativa de Febres-Cordero responde “a un ajuste de cuentas por una bronca que tiene con un sector de la banca, particularmente con el Banco de Pichincha, líder de la banca serrana”.

Pese a eso, Serrano no le quitó mérito a la propuesta, porque la considera una idea “de corte socialista, al querer que la banca facilite créditos a través de intereses no usureros como los de ahora, que son de 14 ó 16%”.

Publicidad

El diputado socialista recalcó la importancia de reactivar el sector productivo, pero insistió en que el proyecto debe ser analizado profundamente. “Espero que el ingeniero Febres-Cordero, que en contadas ocasiones ha venido al Congreso, venga a Quito a sustentar su proyecto”.

Serrano mencionó que su partido tiene una propuesta similar que consiste en la repatriación de capitales. “No podemos concebir que 6 mil millones de dólares de los ecuatorianos se encuentran afuera, seguramente invirtiéndose o con intereses del 2 ó 4%”.

Por su parte, Sandoval afirmó en Citynoticias que las personas contrarias al proyecto reflejan “la desesperación de la banca al ver que se detendrá su negocio de lucro, con rentas de más de $ 140 millones anuales”.

Publicidad

El diputado socialcristiano negó que la propuesta de su bloque tenga tinte regionalista ni intereses particulares. “Solo busca devolver a los ecuatorianos créditos a bajos intereses para aumentar su producción”.

Finalmente, Sandoval confirmó que el proyecto de ley tiene el apoyo de una gran mayoría del Parlamento, “menos del partido Socialista, representado por Víctor Granda, que tiene intereses con el sector bancario, y el PRE”.

Publicidad

Además de los socialistas, el MPD y Pachakutik están en contra de este proyecto, mientras la Democracia Popular observa que éste tiene más riesgos que ventajas.