En las mascotas, los tumores se presentan en el pene, la vagina, el útero, las encías y el paladar.

Toker es un perro mestizo color caramelo, de 3 años, que tiene un tumor maligno alrededor de la base del pene, cuyo aspecto es similar a una coliflor.

“Castizó con un perra, le dio fiebre y se le hincharon el pene y los testículos en julio del año pasado”, dice Jackeline Ladine, dueña de la mascota.

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Con estos síntomas lo llevó al área de Atención Veterinaria Más Salud del Centro de Atención Municipal Integral (CAMI) 6 de Fertisa, donde la doctora Margarita Martínez le diagnóstico cáncer.

Esta enfermedad es de transmisión sexual y social en los perros, explica Martínez.

Lo último ocurre cuando “los animalitos se comunican a través del olfato, se olfatean las zonas genitales. Si una perra enferma está en celo elimina las células cancerígenas a través del sangrado. El macho olfatea la vagina y las células de esa sangre infectada pueden sembrarse en las fosas nasales, en las encías y el paladar cuando la lame. Así aparecen los tumores”, añade.

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La veterinaria Sandra Villao agrega que el cáncer se transmite entre “los perros promiscuos que andan en la calle. Más los machos contagian a las hembras porque a las perras los dueños les tienen mayor cuidado”.

El médico Heraldo Barzola, en cambio, considera que el cáncer canino  afecta tanto a hembras como a machos, sin distinción de edad.

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Estadísticas
Toker es uno de los 19 casos que, desde el pasado enero hasta la fecha, se registran en el centro médico municipal de Fertisa. Todos están en tratamiento: unos reciben quimioterapia y a otros ya se les extirparon los tumores, indica Martínez.

Agrega que entre el 5% y 10% de los perros que acuden a su consulta –atiende diariamente de 30 a 32 canes, de lunes a viernes– presenta tumoración.

Según Diego Sabando, veterinario del Hospital del Día del Kartódromo, en febrero pasado atendió a 470 canes, de ellos el 10% tiene cáncer.

Dice que en las perras los tumores aparecen en la mucosa vaginal (vagina) y pueden avanzar hasta el útero y producir una metástasis que, incluso, puede afectar las glándulas mamarias.

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La veterinaria Narcisa Barzola, del hospital del Día de Cisne II, indica que ha tratado entre 20 y 30 perros con cáncer en los últimos 8 meses.

Mientras que Francisco Escalante, veterinario del centro médico municipal de la isla Trinitaria, señala que en lo que va del año ha tratado a un promedio de 15 canes con esa enfermedad.

Las estadísticas del área de Atención Veterinaria del CAMI de Fertisa reportan que desde 1997 al 2000, el 81% de machos y el 19% de hembras presentaron tumores venéreos transmisibles (TVT), también llamados granulomas o papilomas venéreos.

Según Villao, a estos tumores se los llama papilomas porque tienen forma de verruga y no por el virus conocido con ese nombre.

Tratamiento
Oso, de 5 años, tiene un tumor en la mucosa del prepucio. Entre febrero pasado y este mes recibió los 0,025 miligramos por kg de peso de Vincristina, en cada una de las cuatro sesiones de quimioterapia a las que fue sometido.

Ese medicamento se usa también en la quimioterapia que se aplica a los humanos.

Pero la Vincristina es hepatotóxica, es decir afecta el hígado, según el oncólogo Dennis Layana.

Por esto puede producir la caída del cabello de los canes, como le pasó a Brando Lee, un french poodle color caramelo, que perdió su pelo cuando le aplicaron la primera quimioterapia.

“Es que se la pusieron en hora y media, mientras que aquí en  Fertisa la ponen en cuatro horas”, dice su dueña, Sonia Pazmiño.

La dosis de Vincristina se suministra en un suero, desde las 08h00 hasta las 12h00, tiempo en que el animal permanece en el consultorio de Fertisa. Solo ahí se aplica el tratamiento y se hacen las cirugías.

“Después de la quimioterapia a Oso se le quitaba el apetito y le daba náuseas y vómitos, pero ya terminó el tratamiento”, refiere Miriam Beltrán, propietaria del perro.

En cuanto a cirugías, de diciembre de 1999 a diciembre del 2004 en el dispensario de Fertisa se operaron 28 machos y 68 hembras, menciona Margarita Martínez.

La consulta en las áreas de veterinaria del CAMI de Fertisa y los hospitales del Día de Kartódromo, Cisne II e isla Trinitaria no tiene costo.

COSTOS

Sin costo Las consultas en las veterinarias de los centros médicos municipales de Fertisa y los hospitales del Día de Cisne II, Kartódromo e isla Trinitaria no tienen costo, pero el dueño del perro debe adquirir en el hospital de Solca la ampolla de Vincristina de 1 cm, que vale 6 dólares, en el caso de los que tienen cáncer.

Los canes  reciben la sesión de quimioterapia, que consiste en aplicar dosis de Vincristina, en intervalos de 10 a 15 días.

Antes de ser sometidos  al tratamiento de quimioterapia, los perros son preparados: se los desparasita con medicamentos, vacuna (si no cuentan con todas las dosis), se les chequea los glóbulos blancos y se curan otras enfermedades que tenga, como la anemia y la sarna, según Margarita Martínez, veterinaria del Centro de Atención Municipal Integral de Fertisa.