Empresarios brasileños cerraron al menos 15 acuerdos comerciales con colegas chinos, en el marco de una visita a China del presidente Luiz Inácio Lula da Silva, quien consideró el lunes que el gigante asiático ofrece enormes posibilidades de negocios para su país.
 
"Estoy feliz porque en ningún momento de la historia de mi país un viaje despertó tanta atención de la prensa y de los empresarios brasileños como este viaje a China", dijo Lula en un acto organizado en Pekín por el Ministerio de Comercio chino y la Bolsa de Mercaderías y Futuro (BM&F) de Brasil.
 
El presidente, quien llegó a la capital china el sábado acompañado por ministros y casi 400 empresarios brasileños, dijo que a partir de ese encuentro "estaremos consolidando una de las más sólidas relaciones políticas, comerciales, culturales y económicas que haya tenido Brasil".
 
"Compartimos el mismo objetivo de integrar nuestras economías, de forma competitiva, al mercado globalizado del Siglo XXI", agregó el mandatario, quien ha destacado que las relaciones chino-brasileñas pueden servir para crear un bloque que pueda negociar con mayor fuerza con las naciones ricas y dentro de la Organización Mundial de Comercio (OMC).
 
El Ministerio de Desarrollo, Industria y Comercio de Brasil divulgó poco antes los acuerdos alcanzados por dos países. durante la instalación del Consejo Empresarial Brasil-China, que estará compuesto por empresarios del gigante asiático y de la mayor economía de América Latina.   
 
ACUERDOS EN VARIAS AREAS
 
Entre los acuerdos figuraron los concretados por la minera brasileña Vale do Rio Doce CVRD VALE5.SA RIO.N con empresas chinas por aproximadamente 5.000 millones de dólares, que van desde la producción de carbón a la construcción de una usina siderúrgica en Brasil, según el ministerio.
 
Uno de los más relevantes fue cerrado entre Vale y la empresa Aluminium Corporation of China (Chalco) 2600.HK, la mayor empresa china en el área de bauxita, alumina y alumino, que prevé inversiones de casi 1.000 millones de dólares para la explotación de esos minerales en Brasil.
 
La inversión total, que incluye la construcción de una refinería en el estado brasileño de Pará, la ABC Refinery, puede alcanzar 3.000 millones de dólares.
 
Por su parte la petrolera estatal brasileña Petrobras PETR4.SA formalizó un acuerdo con su similar china Sinopec, que prevé su actuación conjunta en la comercialización, exploración, producción y refinación de crudo, así como la construcción de ductos.
 
El acuerdo, con vigencia hasta junio del 2005, prevé la exploración conjunta de petróleo en aguas profundas de varias regiones del mundo, con la atención volcada inicialmente en Ecuador e Irán.
 
Además, hubo acuerdos en otras áreas, que van desde telefonía móvil a aviación, incluyendo la exportación de café brasileño a China.
 
Según el ministerio brasileño, un acuerdo entre China National Machinery y la Central Termoeléctrica do Sul, en Brasil, prevé la construcción de una usina termoeléctrica de carbón en el estado de Río Grande do Sul. Otro entre la brasileña Companhia Siderúrgica de Pará (Cosiparar) y la china Minmetals Trading busca ampliar las exportaciones de mineral brasileño a China.
 
Se suscribió un memorando de entendimiento entre el estatal Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) brasileño y la agencia de inversiones externas china Citic Group, para concretar el financiamiento de proyectos de infraestructura en Brasil.
 
Los dos gobiernos suscribieron también un memorando que prevé inversiones chinas en infraestructura, principalmente en puertos y redes ferroviarias.
 
La empresa de telecomunicaciones brasileña Telemar Norte Leste concluyó en tanto un acuerdo con China Mobile para el establecimiento de un sistema de conexiones (roaming) internacional.