John Maxwell Coetzee, el segundo sudafricano en obtener el Premio Nobel de literatura, es "el gran heredero de Kafka", dijo este jueves el director del departamento de inglés de la Universidad de Ciudad del Cabo (UCT), Stephen Watson, felicitando a su compatriota por el galardón.
 
"Por donde se lo analice él es el gran heredero de Kafka, ya sea ambientando sus obras en Sudáfrica o en lugares ficticios", añadió Watson.
 
Franz Kafka (1883 - 1924), de nacionalidad checa, fue un existencialista que, con sus temas de alienación de la sociedad y una ansiedad general tan sólo de estar vivo, tuvo una fuerte influencia sobre los intelectuales europeos de su época y las generaciones posteriores.
 
"Coetzee tiene la capacidad de resaltar, como pocos de sus contemporáneos han hecho, algunas de las más imponderables cuestiones de la existencia", dijo Watson de su amigo, con quien compartió durante 30 años la cátedra del idioma inglés en la UCT.
 
Añadió que durante sus tres décadas en esa casa de altos estudios, donde enseño literatura inglesa y estadounidense, Coetzee se relacionó "extremadamente bien" con los alumnos.
 
"Era de una presencia intelectual tan formidable que no podía ser popular en el sentido común de la palabra, pero la admiración por él era increíble", puntualizó el catedrático.
 
La alegría de Watson ante la entrega del Nobel a su antiguo colega fue compartida por los editores en inglés del laureado.
 
Stephen Johnson, director general de "Random House South Africa", que distribuye sus libros -publicados por la misma compañía en el Reino Unido- dijo que la casa editora está "muy emocionada".  
 
"Para un autor es un extraordinario prestigio ser premiado con el Nobel, pero este hombre (Coetzee) es un genio que dice tanto con pocas palabras", afirmó el editor.
 
Johnson puntualizó que Coetzee ha ganado también otros grandes premios de literatura, incluido el mayor galardón británico, el Booker Prize, que obtuvo en dos oportunidades, en 1984 por "Life and Times of Micheal K" y en 1999 por "Disgrace".
 
En abril de 2001, el novelista sudafricano fue merecedor también del I Premio Reino de Redonda, un galardón creado por Javier Marías para distinguir la obra de un escritor o un cineasta extranjero.
 
Coetzee es el segundo sudafricano que recibe el Premio Nobel de Literatura tras Nadine Gordimer, quien fue laureada en 1991.
 
Pese a todos los premios internacionales recibidos, Coetzee, quien reside en Australia, es seguido por muy pocos lectores en su Sudáfrica natal, señaló el profesor David Attwell de la Universidad del Witwatersrand, en Johannesburgo.
 
"No creo que la mayoría de los sudafricanos lo conozcan", dijo Attwell, un especialista en la obra de Coetzee, de quien dijo, sin embargo, que es altamente respetado en los círculos académicos.
 
Por su parte, el gubernamental Congreso Nacional Africano (CNA) alabó el premio otorgado a Coetzee y recalcó que el mismo debe servir de ejemplo a los jóvenes escritores.
 
"El CNA espera que el reconocimiento otorgado a autores sudafricanos como Coetzee y Gordimer sirva de inspiración a los jóvenes escritores en este país y el resto de Africa", dijo el portavoz oficial del partido, Smuts Ngonyama.
 
"El Sr Coetzee no ha llenado de orgullo y esperamos que su premio ayude tanto a editores como a lectores a darse cuenta del vasto potencial literario que posee este continente", añadió el portavoz del CNA.