Súperheroes, un joven buzo, títeres, las casas del estero Salado, con Guayaquil como escenario principal, fueron parte de las temáticas ganadoras de la decimoséptima edición del Festival de Artes al Aire Libre (FAAL). Sus creadores, artistas entre 20 y 40 años, algunos concursantes por primera vez, otros con algunas ediciones en su registro, eligieron al Puerto Principal, sus paisajes y residentes, como la musa de cada una de sus obras.

Dame un besito, del cantautor José Navarrete, ganó el primer lugar en música. “El guayaquileño siempre quiere un beso”, menciona Navarrete, quien realizó la composición pensando en el romanticismo que existe en los lugares turísticos de la ciudad.

Con una sonrisa, Tamara Ortega habla de su obra La Subienda. “Hicimos un performance sobre lo híbrido de la cultura guayaquileña. Existe el cholo, el blanco (...). Armamos un altar con ají, que representa el útero de la ciudad que da de todo”, explica. “Algo bueno me dejaron los dañados”, bromea Óscar Borja, ganador del primer lugar en cortometraje, refiriéndose a Malajunta. “En el audiovisual trató sobre el mundo de los adolescentes en la actualidad. Su transición a la adultez”, menciona Borja.

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Pablo Figueroa, ganador en declamación compartió, el día de la premiación, un extracto del poema Boletín y elegía de las mitas de César Dávila, obra con la que concursó.

La historia de Un joven buzo del Salado es la ganadora del único premio en fotografía. “Muestro la realidad desconocida de las personas que viven junto al estero Salado”, señala su autor, Jonathan Palma.

En teatro Platillo escénico, de Omar Aguirre, es la triunfadora. “Armamos todo desde cero para poder adaptarnos al espacio escénico”, cuenta Aguirre. “El actor debe adaptarse al aire libre y Aguirre lo logró”, menciona Jorge Sandoval, jurado en esta categoría.

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“Una historia bonita para todo el hogar guayaquileño”, refiere Marcelo Cruz sobre Franklin y el fruto del amor, con la cual ganó en títeres.

El grupo Folcosta participó por tercera vez. “Ganamos representando al montubio”, recalca Jorge Ruiz, director de la agrupación. Carolina Pepper, jurado en Danza, cuenta que Folcosta logró cautivar al público. “Ser intérprete en el baile también es importante”, dice.

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El primer lugar en escultura fue de Segundo Fares. “En ella muestro las casas que están al pie del Salado. Con colores oscuros similares al del cangrejo”, indica.

El dragón que aparece en el Hemiciclo de la Rotonda es el protagonista del dibujo ganador Defensores, de Patrick García; Sin título es la triunfadora en pintura.

Su creador, José Rojas, explica que es una muestra irreverente a lo malo de la sociedad guayaquileña actual. (F)