Leonardo DiCaprio y Brie Larson avanzaron este sábado hacia el Óscar al llevarse en Los Ángeles los premios más importantes del sindicato de actores estadounidense (SAG), en una fiesta que celebró la diversidad de la profesión en medio de la polémica que sacude Hollywood.

Sin sorpresa, DiCaprio se impuso por su rol en El renacido, el drama del director mexicano Alejandro González Iñárritu sobre la conquista del oeste en la década de 1820.

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"Me siento muy honrado por este premio porque viene de ustedes", dijo el artista, de 41 años, quien da vida al trampero canadiense Hugh Glass.

"Esta película no habría sido posible sin nuestro director, Alejandro González Iñárritu. Gracias por tu autenticidad", agregó.

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Antes de ir a recoger el premio, DiCaprio fue felicitado por la actriz Kate Winslet, quien protagonizó con él Titanic. Se abrazaron efusivamente.

 

Brie Larson recogió la estatuilla a Mejor actriz por su actuación en La habitación, un drama que cuenta cómo una madre y su hijo sobreviven a un secuestro.

"Está película ha sido posible gracias a ti", dijo emocionada a su pequeño compañero de reparto, Jacob Tremblay, de 9 años.

El británico Idris Elba vivió de su lado una noche soñada al ser doblemente recompensado.

Por un lado se impuso por su papel secundario en Beasts of No Nation, la película de Netflix que cuenta a través de los ojos de un niño cómo una guerra civil desgarra un país africano. Por otro, fue el mejor por dar vida a un detective especializado en delitos graves en la miniserie Luther.

Del lado femenino, la sueca Alicia Vikander se alzó con el premio a Mejor actriz de reparto por encarnar en La chica danesa a la esposa de Lili Elbe (Eddie Redmayne), una de las primeras transexuales de la historia.

Michael Keaton, Rachel McAdams, Mark Ruffalo y el resto de actores de Spotlight subieron a recoger el galardón a Mejor elenco por recrear las investigaciones del diario The Boston Globe que destapó los abusos sexuales de la Iglesia católica.

Del lado de la televisión, Kevin Spacey se llevó de nuevo el SAG por encarnar al ambicioso político Francis Underwood en el drama House of Cards.

Viola Davis arrasó de su lado por su papel protagonista en How To Get Away With Murder.

Los actores de Downton Abbey recibieron de nuevo el premio al Mejor elenco en una serie dramática.

La comedia Orange Is The New Black, que narra la vida de un grupo de presas, volvió a celebrar los premios a Mejor elenco y Mejor actriz para Uzo Aduba, tal y como ocurrió el año pasado.

Jeffrey Tambor se alzó de su lado con el galardón a Mejor actor por Transparent, la comedia en la que interpreta a un hombre que decide vivir su transexualidad llegado a la edad dorada.

Los SAG son uno de los indicadores más importantes para saber quién se llevara el Óscar, ya que parte de los miembros del sindicato de actores votan en los galardones que entregará la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas estadounidense el 28 de febrero. (E)