Los millones de ecuatorianos que votaron por la candidatura de Daniel Noboa Azín lo hicieron con la fe de cambiar el destino de nuestro país, cambiar todo lo malo por lo bueno, la corrupción por incorrupción, la ignorancia por educación, el hambre por alimentos y caminar por un engranaje de progreso y cambio social y económico.
El Ecuador que Noboa hereda de Noboa
Señor presidente, cuando le imponían la banda presidencial y presentó su informe a la nación lo hizo con un estruendoso discurso que llenó todo el ámbito de la Asamblea, fue un discurso como de un viejo político que narraba la tragedia que había sufrido la nación y que ahora estaba siendo rescatada.
Los ecuatorianos de corazón pedimos a Dios que le brinde toda la sabiduría para gobernar este pequeño país y que lo vuelva a convertir en esa nación de paz y progreso, para eso debemos cumplir con nuestra palabra de honor y exigir que todo funcionario público trabaje con integridad y honestidad, y laborando en forma paralela con el poder Ejecutivo buscando en cada provincia y cada pueblo las necesidades que tienen y que hay que remediarlas, además, enseñando a cada ciudadano las obligaciones que tiene que cumplir, no solo exigiendo, sino siendo ejemplo. Quien triunfa en la vida es quien se levanta y busca todas esas posibilidades.
Publicidad
El mejor gobierno es el que hace feliz al pueblo y sabe cómo lograrlo, por eso los asambleístas tienen que legislar y crear leyes inteligentes que beneficien, no que opriman, los embajadores o cónsules deben ser la imagen del país, buscar todos los mecanismos de relaciones comerciales que nos permitan ganar, ganar. Trabajar en conjunto con el Ministerio de Relaciones Exteriores y el Ministerio de Turismo para que conozcan las maravillas de este pequeño pueblo que tiene cuatro hermosas regiones: Costa, Sierra, Oriente e Insular. E invitar a expertos profesores de la Universidad Agraria El Zamorano para que visiten nuestro país y preparen y enseñen a nuestro agricultores y ganaderos como tener mejores producciones agrícolas y ganaderas. (O)
Franklin Washington Gallegos Avilés, teniente en servicio pasivo, Guayaquil