Las juntas encargadas de recibir los votos y hacer el escrutinio deben instalar a sus miembros a las 06:00, verificar que las urnas estén vacías y las papeletas de votación sin alteración, si están marcadas, tomarles fotos y denunciar.

Las autoridades electorales tienen que demostrar honestidad, tener un sistema informático nacional; debe estar una veeduría ciudadana atenta cuando se saquen las papeletas de las urnas y separen por votos, para evitar que las rayen anulando votos, o llenen los votos en blanco. Los delegados deben pedir a las juntas copias de las actas. Las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional deben observar que cada junta cumpla con su deber, hacer absoluto control en el sistema informático para que ingresen correctamente los datos a favor del acreedor de cada voto. El Consejo Electoral tiene que aplicar transparencia, celeridad, eficiencia, con profesionales politécnicos conocedores del software y detecten irregularidades durante el escrutinio. Las juntas cumplirán los artículos 49 y 50 del Código de la Democracia, lo contrario será delito flagrante. En las elecciones, el triunfo sea por la democracia, la libertad, el trabajo, la justicia, la anticorrupción. (O)

Jorge Ignacio Arámbulo Benavides, abogado, Guayaquil