De todas las ciencias sociales, la más importante es la politología, la cual no solo constituye el arte de gobernar positivamente, sino que es determinante para el triunfo particular o colectivo. La mayoría de la ciudadanía desconoce la trascendencia de esta ciencia; por eso, siempre son engañados con falsas promesas de politiqueros que prometen lo que no van a cumplir aprovechándose de la laguna de desconocimiento de las personas. Aristóteles dijo que “el hombre es un animal político”; y, en caso de no ser político, es solo un animal. Debería existir una unión de intelectuales destacados, de libre pensamiento, que conformen una estructura de participación política. (O)
Ricardo Ordóñez Jaramillo, pedagogo y politólogo, Guayaquil