La mayoría contó las horas para “que se acabe el horrible año 2020”, como lo llamaron porque trajo una pandemia, millones fallecieron a causa del virus, un año de encierro, un año en el cual muchos perdieron sus empleos, un año de tristeza y dolor, un año que nos cambió la vida. Pero no recordemos lo malo transcurrido en ese periodo. Qué mejor que ver lo especial que fue y lo representativo, para no olvidar jamás.
Mejor agradece por la vida, porque lo aprendido en tu vida personal o simplemente por tomar una pausa para volver a empezar, ya que nunca es tarde. La prueba nos enseñó dar tiempo a nuestras familias e inclusive a las que casi no hablábamos, nos acercamos a ellas. Apreciamos cada alimento Compartimos las cosas simples que nos hacen felices, por ejemplo un abrazo. De tantas malas noticias: virus, corrupción, delincuencia; los ecuatorianos nos merecíamos finalizar el año de la mejor manera, festejando el triunfo del equipo Barcelona. El año 2021, sea mejor, lleno de esperanza y sin virus.(O)
Viviana Jamileth Campos Arreaga, Pascuales, Guayaquil